La Diputació de València ha incrementado cada año la partida destinada a Bienestar y servicios sociales durante la presente legislatura con la prioridad de “rescatar a las personas y trabajar para ellas”. Lo afirma Mercedes Berenguer, responsable del área más amplia de la corporación provincial, que trabaja en programas de salud, investigación, educación y promoción del bienestar en el ámbito local.
Esta gestión se ha traducido, por ejemplo, en la creación de 500 nuevas plazas públicas en centros sociales, en los que “estas personas mayores, con discapacidad, con problemas de salud mental o menores con dificultades de adaptación podrán ser atendidos en condiciones después de 20 años de travesía por el desierto en los que no se ha ofertado a la ciudadanía este tipo de servicio fundamental”.
Así explica la creación de nuevos centros sociales en Ademuz, Agullent, Aras de los Olmos, Carcaixent, Mislata o Sueca, entre otros, la diputada Mercedes Berenguer, que destaca igualmente la mejora de las instalaciones educativas como otro de los grandes ejes de la gestión provincial en materia de bienestar. En total, más de 40 millones de euros invertidos en creación de centros de día, de menores y residencias y mejora de colegios en decenas de municipios de la provincia.
En opinión de Berenguer, “para fomentar la educación es básico mejorar las instalaciones en las que dan clase las niñas y niños, y esta corporación ha actuado por encima de quimeras estableciendo inversiones reales que han permitido mejorar el ambiente en los colegios y el proceso formativo”. Inversiones que han llegado a las personas de forma directa o indirecta, como las becas a jóvenes investigadores a través de la Fundación del Hospital General que han permitido financiar proyectos de investigación sobre el cáncer, genética y el virus del Zika.
Legislatura del bienestar
La que Mercedes Berenguer califica como “legislatura del bienestar” nos deja además otros datos de gestión como el millón y medio de euros con el que se han subvencionado más de 450 programas municipales de ocio saludable y vida activa; las 41.200 técnicas aplicadas a los 8.600 pacientes con los que ha contado la itinerante Ruta de la Salud; y los 26.000 usuarios del servicio de Teleasistencia para mayores de 70 años o personas con movilidad reducida que viven solas.Otras 20.000 personas han pasado por las más de 1.000 actividades que se han llevado a cabo en materia de prevención en drogodependencias, “en especial nuevas adicciones a las altas tecnologías y el juego que hacen mella en los menores y que debemos trabajar en el día a día”. Y algo más de 18.000 vecinas y vecinos de todas las comarcas han visitado y descubierto la historia y el patrimonio de la Diputació a través de ‘Açó es la Dipu’ y ‘Els dimecres ens veiem’.
En un área multidisciplinar como es el Bienestar, la formación ocupa un lugar destacado. Su importancia se traduce en cifras como los 1.500 alumnos que cursan sus estudios en la Escuela de Capataces de Catarroja y la de Viticultura de Requena, ambas de la corporación; los 325 alumnos de Formación Profesional Adaptada, 42 de ellos con necesidades educativas especiales; y los 2.575 inscritos en la Universidad Estacional, que ha acercado esta formación superior a todo el territorio con jornadas sobre ciberacoso, cooperativismo o violencia infantil en 11 municipios.
En resumen, la diputada de Bienestar Social señala que “el objetivo es siempre mejorar las condiciones de la persona, la salud, su formación y que la vida humana sea más digna y competitiva”.