El Departamento de Bienestar Social del Ayuntamiento de Carcaixent está trabajando para hacer frente en la difícil situación derivada de la emergencia sanitaria provocada por la Covid-19, apoyando a las personas que se encuentran en una mayor situación de vulnerabilidad económica y social.
Desde el comienzo de la crisis sanitaria y la declaración del Estado de alarma hasta el momento, se ha atendido además de 970 personas individuales y familias, a las que se ha prestado servicios que incluyen atención telefónica e información; ayudas de alimentación y productos de primera necesidad, suministros y alquiler; atención psicológica, pedagógica y jurídica y ayuda domiciliaria de varios tipos, entre otros.
En este sentido, la concejala de Bienestar Social, Teresa Oliver, ha explicado que todo el personal del departamento se puso en marcha desde el primer momento para estar junto a las personas que más lo podían necesitar, afirmando que "durante estos días se ha hecho un esfuerzo importante de coordinación para estar en disposición de continuar prestando servicio y estar junto a las personas en uno de los momentos más complicados que nos ha tocado vivir como sociedad". La concejala también ha reconocido que la situación después de la crisis puede ser muy complicada "hasta el momento se ha hecho un gran trabajo, pero desde el Ayuntamiento de Carcaixent somos conscientes que todavía queda mucho trabajo por delante y vamos a hacer todo lo que esté en nuestras manos para que los sectores más vulnerables no sean los más afectados".
Diversidad de ayudas
Desde el comienzo de la crisis sanitaria se han concedido ayudas para la adquisición de alimentación básica y productos de primera necesidad con motivo del Covid-19 a 85 unidades de convivencia (259 personas), mediante una aprobación de una convocatoria de ayudas para la adquisición de alimentos básicos; habiendo destinado hoy en día un total de 13.000 euros a estas ayudas, que está previsto incrementar. Además, se mantiene la solicitud, tramitación y concesión de prestaciones económicas individualizadas (PEIs) para el pago de suministros y alquiler.Para dar más y mejor servicio, se ha aumentado en seis personas el Servicio de Ayuda a domicilio (municipal y por dependencia), siguiendo así garantizando la atención de las necesidades básicas (higiene personal y movilización, alimentación, compra o administración de medicamentos, entre otros) de aquellas personas que requieren ayuda diaria, si bien atendiendo a las nuevas necesidades y demandas surgidas.
Aun así, se está dando prioridad máxima a las urgencias sociales inaplazables, así como priorizando las resoluciones urgentes de las Rentas Valencianas de Inclusión pendientes de resolución por la Conselleria, habiendo propuesto un total de 8 rentas para ser tramitadas con carácter de urgencia.
Por otro lado, alrededor de 180 personas han recibido hasta el momento apoyo psicológico, pedagógico y jurídico por vía telefónica, por parte de las diferentes profesionales que componen el equipo y desde los diferentes servicios (EEIIA, UPCCA). Asimismo, se ha llevado a cabo atención telefónica y seguimiento de 150 familias con menores en situación de riesgo, en coordinación con otros agentes intervinientes (ámbito educativo, sanitario y policial), dando atención inmediata a las incidencias ocasionadas con estas familias a causa de la nueva situación.
Finalmente, se mantiene el seguimiento y atención telefónica a 120 personas usuarias de centros específicos como el Centro Ocupacional «El Clot», el Centro de Día «Virgen María de la Salud», así como a 7 personas menores con medidas judiciales en medio abierto, 27 personas beneficiarias de la Renta Valenciana de Inclusión y 50 persones miembros de los diferentes órganos de participación de la ciudadanía como el Consejo de Acción Social y el Consejo de inclusión y Derechos Sociales y el Consejo Municipal de Infancia y Adolescencia.