La tercera ola golpeó bien fuerte la sociedad valenciana e incluso las dependencias sanitarias que sufrían una grave sobrecarga haciendo que incluso hospitales se quedaran sin paritorios para destinar esas zonas a pacientes COVID, tal como ocurrió en el Clínic de València. Si hace un mes la incidencia de la Comunitat Valenciana llegaba a su máximo histórico de toda la pandemia superando los 1.500 casos por cada 100.000 habitantes, mes y medio después, la incidencia se sitúa por debajo de los 50, situándose en la más baja de España y la Comunitat Valenciana está a poco de salir de la zona de riesgo, a pesar de que para Alemania y otros países europeos ya está fuera de esta zona roja para que los turistas europeos puedan venir durante la Semana Santa y reactivar el turismo, un hecho muy criticado por los valencianos y las valencianas, puesto que mientras la Comunitat Valenciana se encuentra confinada perimetralmente y no se puede ni entrar ni salir, los trayectos aéreos para los alemanes no solo se han reactivado sino que se han aumentado las conexiones.
Los datos de esta semana son esperanzadores, y es que hace dos días, que las residencias de la Comunitat Valenciana no registraron ningún nuevo contagio en 24 horas y que el ritmo de vacunación por grupos de edad continúa avanzando, a pesar de que las dudas sobre la vacuna de AstraZeneca, después de su paralización en plena vacunación masiva de los docentes valencianos, van aumentando.
A estas alturas, la trazabilidad de la COVID-19 se encuentra controlada y no hay riesgo de perderla, puesto que los contagios que se registran día tras día apenas superan el centenar y las muertes, continúan a la baja. Sin embargo, las autoridades sanitarias continúan viendo la vacuna como la única esperanza y como el principio del final de esta pandemia.
PACIENTES VALENCIANOS CON TROMBOS
La Consellería de Sanidad Universal y Salud Pública ha notificado al Centro Nacional de Farmacovigilancia el registro de tres casos de trastornos de la coagulación en pacientes a los cuales se ha administrado la vacuna de AstraZeneca en la Comunitat Valenciana.Se trata de tres hombres de 38, 41 y 50 años que se están actualmente estudiando y evaluando, pero ninguno de ellos presenta compilación diagnóstica de trombosis cerebrales y no se ha observado trombocitopatía. Por lo tanto, no estarían dentro de los casos de trombosis venosos cerebrales que han despertado interés y más preocupan en el contexto del alerta que está siendo evaluada en el Comité de Evaluación de Riesgos de Farmacovigilancia (PRAC en sus siglas en inglés).
VACUNACIÓN MASIVA
El ambicioso plan de vacunación del Consell continúa haciendo pasos y cubriendo etapas, pero poniendo el foco en el mes de abril como el periodo de esperanza para vacunar 'non stop' con el cual se establece un escenario de implementación de 400.000 dosis semanales, una cifra que se ajustará a los suministros definitivos de las farmacéuticas principales.De este modo, se han establecido 161 puntos en diferentes municipios valencianos donde se realizará esta campaña que, en función del tipo de municipio se hará a un lugar a otro. En las localidades menores de 10.000 habitantes se realizará en zonas anexas en los centros de salud y espacios municipales; en las ciudades hasta 50.000 habitantes tendrá lugar en locales municipales; y en las grandes ciudades (València, Castelló, Elche y Alicante) se vacunará en hospitales de campaña, grandes espacios (Ciutat de les Arts y les Ciències, Ciudad de la Luz, IFA y Palacio de Congresos de Castelló) y centros sanitarios.
Si los suministros definitivos se cumplen, se vacunaría a 1,6 millones de valencianos y valencianas en un mes, hecho que supondría un gran paso, puesto que en solo un mes se habría inmunizado a más de un 30% de los valencianos y valencianas.
Ahir es va iniciar la campanya de vacunació al personal educatiu amb AstraZeneca.
Sin embargo, la paralización de la administración de la vacuna de AstraZeneca empieza a tener consecuencias notables en el plan de vacunación masiva que tenía preparado la Consellería de Sanidad. Esta suspensión provoca que 84.000 dosis que se tenían previstas para inyectar se queden en las neveras esta semana, pero el efecto será todavía mayor si se tiene en cuenta que esta suspensión tendrá una duración de 15 días. Esta decisión fue prácticamente conjunta entre los países europeos, después de detectarse algunos casos de trombos en Alemania.
Pero, si las autoridades sanitarias europeas descartan que los casos de trombosis tienen relación con el efecto de la vacuna de AstraZeneca, esta vacunación masiva se podría retomar con todas sus previsiones iniciales o incluso, se podría ver aumentado este ritmo, puesto que todo apunta que la vacuna de Janssen podría empezar a llegar a partir del 15 de abril con unas cantidades de hasta 20 millones en total.