En el debate de RTVE la Comunidad Valenciana gozó de un protagonismo fugaz, de apenas unos segundos. Fue por parte de Albert Rivera, el candidato de Ciudadanos a la presidencia del Gobierno, para repetir las teorías de los candidatos autonómicos de Toni Cantó (Cs) e Isabel Bonig (PP) sobre un supuesto "peligro" de supervivencia del castellano. Ayer, en Atresmedia, la Comunitat se abrió paso unos segundos más; se habló del problema de la infrafinanciación y de la corrupción del PP valenciano.
"Es muy humillante para muchos españoles. El problema territorial no solamente es Catalunya", aseveraba Pablo Iglesias en una intervención. Fue en el bloque de 'Política Territorial' que, para encaminarlo, desde Atresmedia ya le alargaron el nombre a 'Política Territorial / Cataluña'. El independentismo catalán copó la mayor parte del bloque, con un presidente socialista recordando que no ha pactado con ellos, y un Pablo Casado (PP) y Rivera que anunciaban una especie de 'catástrofe' en Catalunya y España si el presidente socialista revalida.
Iglesías señaló que "hay muchos valencianos que tienen un problema de financiación" a los que, asegura, les "ofende" que "solamente se hable de Catalunya cuando se habla del problema territorial". Tras esto, el candidato de Unides Podem recordó otros de los problemas más sonados, como el tren extremeño, la situación de las isleños de Balears y Canarias, y el problema de la despoblación rural.
Este último apunte también afecta a la Comunitat: el 66% de los municipios de Castelló están en riesgo de desaparecer debido a la 'España Vacía'.
Parque Temático de la Corrupción
Tras la intervención de Iglesias sobre el problema territorial, el presidente Pedro Sánchez se quiso sumar a sus reivindicaciones: "Creo que el problema territorial no es solamente Catalunya, aunque sí es cierto que tenemos ahí el epicentro". Para él es también, "evidentemente", un problema la financiación autonómica de la Comunitat, además de todos los puntos detallados por Iglesias.Antes de este gran bloque, sin embargo, Sánchez ya había mencionado a la Comunitat Valenciana, para recordar a Casado el pasado corrupto del PP y a Rivera el de su principal socio. "En la Comunitat hay 3 expresidentes procesados, imputados o involucrados con la corrupción. ¡13 consejeros!", exclamó. Se refiere a los expresidentes Eduardo Zaplana, José Luis Olivas y Francisco Camps. Ha señalado, además, que uno de estos Consellers está investigado "por haber robado dinero de ayuda a la cooperación para niños enfermos de VIH en Haití". Es el caso del exconseller Rafael Blasco, que coincidió parte su cartera con la actual candidata del PP a la Generalitat, Isabel Bonig.
Sánchez pretendía con esta intervención, sobre todo, recalcar a Rivera el pasado del PP para señalar que, pese a ello, hace "un cordón sanitario al Partido Socialista" pero no a los populares o a la ultraderecha de Vox: "En Valencia lo que había era un Parque Temático de la Corrupción".