El concejal de comercio del Ayuntamiento de València, Carlos Galiana, ha explicado que el Ayuntamiento ha suspendido "sine die" la tasa que pagan los vendedores que tienen un lugar en los mercados de venta no sedentaria de la ciudad. La medida afecta a más de 1.000 familias con licencia para poner parada en los mercadillos.
Concretamente, esta tasa tiene carácter bimestral y por cada dos metros lineales de parada se paga una cuota de 50,56 euros en los mercados de barrio y de 12,84 euros en los mercados periódicos festivos. Ahora, con este decreto del Ayuntamiento, los vendedores y vendedoras están exentos de pago.
El concejal Galiana ha dicho que "no tenía sentido que si están anulados los mercados de venta extraordinaria se mantuviese la tasa, así que hemos decidido suspenderla hasta que la situación de emergencia sanitaria pase. Pensamos que es lo justo y que el Ayuntamiento debe estar al lado de las familias y de los autónomos".
Desde la semana pasada, el Ayuntamiento de València, a través de la concejalía de Comercio, suspendió hasta nuevo aviso los 20 mercados de venta no sedentaria que se celebran en los diferentes barrios de la ciudad de València.
Tal y como explicaba Galiana cuando se aplicó la suspensión "se trata de una medida más para evitar las concentraciones numerosas de gente en la calle y proporcionar las condiciones necesarias para que la gente esté en casa y evitemos más contagios en los próximos días y semanas".
El Ayuntamiento avisará, llegado el momento, del fin de la suspensión que afecta a la celebración de los mercados de venta no sedentaria. Este decreto afecta tanto a los mercados de barrio como a los extraordinarios (rastro, y productos antiguos del centro histórico).