El alcalde de València, Joan Ribó, solicitará formalmente en el próximo Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria de València (APV) la realización de una nueva Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del proyecto de ampliación norte del Puerto de València.
Así lo ha anunciado el primer edil en la reunión que ha mantenido esta tarde en el Hemiciclo del Ayuntamiento con una veintena de entidades vecinales y ecologistas.
La decisión del alcalde se produce después de que Puertos del Estado determinara a principios de abril que la DIA concedida en 2007 sigue vigente y que la APV es la encargada de determinar la necesidad de una nueva evaluación. La Comissió Ciutat-Port criticó este anuncio y avanzó su disposición a acudir a los tribunales.
Podem València acordó sumarse a la vía judicial y Compromís per València también anunció que recurrirá ante los tribunales la "decisión unilateral" de la "insostenible" ampliación sin un nuevo informe ambiental, mientras que Esquerra Unida València Ciudad decidió personarse en la causa que la Comissió Ciutat-Port presentará ante los tribunales.
Ribó ha señalado que, como alcalde de la ciudad, tiene la obligación de "defender los intereses de la ciudad" y que, como miembro del Consejo de Administración, conoce "si no de primera mano, bastante directamente, toda la problemática de este proyecto, que ha ido cambiando al largo del tiempo" e "inicialmente contemplaba el dragado de la entrada de esta nueva terminal hasta -22,5 metros", "con un informe de un antiguo director de Puertos que decía que iba a afectar de una manera muy agresiva a todas las playas del sur, se retiró igual que se retiró la ampliación".
Por tanto, ha insistido, "estamos ante un proyecto modificado". Asimismo, Ribó ha recordado que esta modificación del proyecto ha supuesto "una carencia de materiales sólidos para hacer todo el recubrimiento" y que "eso tiene un problema medioambiental".
Así, el alcalde ha explicado que pedirá que se haga una nueva DIA "como la ley manda" porque el proyecto implica "una serie de riesgos" como la afección a las playas del sur, "de dónde vendrá el 1.300.000 m3 para recubrir la famosa ampliación" y, "por encima de todo", el "problema más importante" que es las consecuencias para la movilidad de la llegada de "varios millones más de contenedores" al puerto.