El alcalde de València, Joan Ribó, ha mantenido este jueves un encuentro con el presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar, Manuel Alcalde, a quien ha pedido el apoyo y la colaboración de la entidad para dar una solución definitiva a los problemas hídricos que sufre l’Albufera. Acompañado por el vicealcalde y regidor de Devesa-Albufera, Sergi Campillo, el alcalde ha dado a conocer también el proyecto de renaturalización del nuevo cauce del Túria a la CHJ, cuyo presidente ha manifestado su respaldo a ambas propuestas municipales.
Joan Ribó ha reclamado la implicación de la Confederación Hidrográfica para «solucionar de manera definitiva los problemas hídricos de l’Albufera». Tal como ha subrayado el alcalde «es necesario que en el nuevo marco de planificación del río Júcar se designe una cantidad de agua para el lago». «L'Albufera se está recuperando, pero hemos de dar un paso adelante y asignarle unos caudales procedentes de la cuenca del Júcar para poder consolidar esta recuperación». Ribó ha explicado que la recuperación ambiental del lago y de todo el humedal valenciano tiene un carácter «prioritario y fundamental» para el Gobierno Municipal, cuya voluntad es resolver de manera definitiva los problemas de dotación hídrica que sufre el Parque Natural desde hace años. «Estamos a las puertas de un nuevo ciclo de planificación hidrológica que durará 6 años, hasta 2027, en el Júcar y, por tanto, éste es el momento de resolver definitivamente la cuestión».
El vicealcalde Sergi Campillo, por su parte, ha hecho un recorrido por las mejoras del parque natural desde 2015 hasta la actualidad, y ha añadido que «para nosotros todavía no es suficiente, y por eso desde la Concejalía de Devesa-Albufera continuamos trabajando con todos los actores implicados para que la regeneración del lago sea una prioridad para la población que vive en el parque natural, para los sectores económicos que también tienen que velar por su conservación y, evidentemente, para las administraciones, que tenemos la obligación de gestionar el día a día del lago para lograr un estado óptimo de éste. Y en este último caso, el papel de la Confederación Hidrográfica es vital, porque es el ente de quien dependen el presente y futuro del lago, a través de las aportaciones de agua».
Campillo ha subrayado la «voluntad de diálogo del Ayuntamiento con las administraciones competentes en cada materia», y ha destacado que «con datos objetivos en la mano, es cierto que l’Albufera se está recuperando: la presencia de contaminantes ha bajado muchísimo en los últimos años, pero todavía no ha recuperado todo su potencial ecológico, una laguna de aguas cristalinas que es la que conocieron nuestros abuelos y abuelas, llena de plantas subacuáticas que ahora comienzan a recuperar terreno».
El presidente de la CHJ, Manuel Alcalde, se ha mostrado «totalmente de acuerdo» con las propuestas, y ha asegurado que desde la Confederación «vamos a trabajar decididamente para plantear las soluciones para que sea así, desde la colaboración con todas las entidades responsables». En este sentido, el alcalde ha añadido que «creemos que el tercer ciclo de planificación es el marco adecuado para definir calendarios y responsabilidades, y consideramos que en 2027 podemos tener cumplido un alto porcentaje de los objetivos ambientales. Nosotros vamos a trabajar decididamente para plantear las soluciones para lograrlo».
LA RENATURALIZACIÓN DEL NUEVO CAUCE DEL TÚRIA
El otro asunto que ha centrado el encuentro ha sido el proyecto de renaturalización del nuevo cauce del Túria, es decir, la creación de un gran corredor verde en el cauce del río, que fue desviado hace 50 años de su trazado original como medida de prevención tras la riada del ‘57. Tal como ha recordado el alcalde, esta obra pública fue habilitada en los años sesenta, en el marco del llamado «Plan Sur», «fruto de los planteamientos ‘desarrollistas’ de la época, que dibujaba un nuevo cauce arrasando centenares de hectáreas de huerta y alquerías, lo que generó una cicatriz en el territorio de la València sur que todavía perdura».Hoy en día, ha lamentado el alcalde, el nuevo lecho fluvial es «una gran cañería de cemento a cielo abierto pero, si mantenemos su uso originario que es prevenir grandes avenidas de agua, y a la vez lo reconvertimos en corredor verde, uniría nuestros dos parques naturales más emblemáticos: el de la Albufera y el del Túria, y sería un espacio verde y de esparcimiento ciudadano, un elemento de conexión de biodiversidad, y un punto de unión entre los municipios del sur de la ciudad, todo de manera compatible con los usos hídricos previstos». El alcalde ha destacado que este proyecto «depende mucho de la Confederación», y se ha felicitado «por la buena recepción que ha tenido; sabemos que es un proyecto muy complicado, pero salimos de aquí con muchas ganas de continuar trabajando».
En este sentido, el presidente de la CHJ, Manuel Alcalde, ha valorado la renaturalización del nuevo cauce del Turia, «un proyecto con muchos factores implicados, que no va a ser sencillo, pero que es ilusionante, y la Confederación lo ha cogido con interés». De hecho, el alcalde ha asegurado que «algunos de los aspectos se podrán incluir en el nuevo ciclo de planificación, como por ejemplo el establecimiento de un caudal ecológico».
La reunión mantenida hoy entre el alcalde Joan Ribó y el vicealcalde y delegado de Ecología Urbana, Sergi Campillo, con los representantes de la Confederación Hidrográfica del Júcar se produce como un compromiso después del encuentro que el alcalde y el vicealcalde mantuvieron hace dos semanas con la vicepresidenta del Gobierno y ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera.