El Ayuntamiento da vía libre a la ampliación de las terrazas de la hostelería para compensar las pérdidas por el obligado parón de los negocios y la vigente obligatoriedad de reducir el aforo como medida de seguridad por la pandemia de Covid-19. Este mismo viernes, la Junta de Gobierno Local ha aprobado de manera efectiva que los bares y restaurantes, y locales de hostelería en general, puedan ampliar de manera temporal sus terrazas y las condiciones y trámites para poder llevarlo a cabo.
El vicealcalde, Sergi Campillo, ha explicado hoy los detalles de esta medida, que se ha impulsado en apoyo del tejido empresarial del sector del ocio y de la restauración de la ciudad, que se ha visto muy afectado por las medidas de confinamiento y las consecuencias de la desescalada por fases. Acompañado por la vicealcaldesa, Sandra Gómez, el vicealcalde ha explicado los acuerdos adoptados hoy por la Junta de Gobierno Local.
Las personas interesadas podrán solicitar el incremento de la superficie de las terrazas de sus locales "con carácter temporal y excepcional, y respetando siempre la proporción del 50% entre mesa y superficie disponible". La tramitación de las solicitudes se efectuará en las Juntas Municipales de Distrito y, tal como ha subrayado el vicealcalde, se trata de autorizaciones "temporales y de carácter excepcional, que quedarán sin efecto en el momento en que se permita el 100% de la ocupación". Además, la ocupación máxima permitida será de diez personas por mesa o agrupación de mesas, teniendo que existir como mínimo 2 metros de distancia entre las mesas o grupos de mesas. En cuanto a los toldos fijos existentes, no podrán cerrar más de dos lados.
La iniciativa es fruto del acuerdo y el consenso alcanzado entre la concejala de Espacio Público, Lucía Beamud, con la Federación de Hostelería y la Federación de Asociaciones de Vecinos "ya que es muy importante conjugar y garantizar los derechos de todas las partes y, al mismo tiempo, dar un valor de oxígeno a este sector, el de la hostelería, que lo ha pasado y que lo está pasando muy mal", ha subrayado el vicealcalde.
Por ello, la decisión del Equipo de Gobierno va más allá de lo que establece la Ordenanza, y contempla también la agilización de la concesión de las autorizaciones. Si hasta ahora, ampliar una terraza, por ejemplo, en una zona ajardinada requería de un informe previo del Servicio Municipal de Jardines, a partir de ahora se optará por conceder de manera automática la petición a la vez que se informa de los requisitos que se exigen y, posteriormente, comprobar mediante inspección por parte de los técnicos municipales (Policía Local y Servicio de Inspección) que dichos requisitos se cumplen. Además, desde el Servicio de Personal se ha ampliado la dotación de personal dedicado a resolver y dar salida a las peticiones. Todo permitirá que los hosteleros puedan poner en uso de manera inmediata los espacios ampliados de terrazas con todas las garantías de seguridad.
Campillo ha destacado el apoyo y la agilidad por parte del Ayuntamiento a la hora de dar respuesta a las necesidades de los diferentes sectores, en este caso la hostelería, que "aunque no es una subvención directa, ya que esta es otra línea que ha impulsado también el Gobierno Local, también se trata de una medida que contribuye a reactivar la economía.
SUBVENCIONES A LAS FALLAS POR VALOR DE 4,5 MILLONES
En este mismo sentido, el vicealcalde ha anunciado que a partir de la semana que viene ya se harán efectivos los pagos de las subvenciones a las comisiones falleras del 62,5% de sus costes, de manera que puedan hacer frente a los gastos comprometidos con sus distribuidores, y que, en términos totales, suponen un montante de 4,5 millones de euros. De esta manera, el Ayuntamiento apoya la actividad y la continuidad del ámbito fallero en su conjunto (todo el sector productivo que se desarrolla en su entorno: artistas falleros, floristas, indumentaristas, pirotecnia, carpas…). Como es conocido, el Ayuntamiento subvencionaba tradicionalmente el 25% del coste de los monumentos falleros, pero tras la suspensión de las fiestas de Fallas, se aprobó que del 75% restante, que históricamente habían asumido las comisiones falleras, el Ayuntamiento financiaría el 50%, es decir, el 62,5% del coste total, con el objetivo de que las comisiones falleras pudieran cumplir con sus compromisos con una serie de empresas pequeñas a las que el equipo de gobierno local ha querido también ayudar.Precisamente, la semana pasada ya se hizo efectivo el pago de las ayudas del Ayuntamiento a las comisiones falleras para la iluminación decorativa de las calles de su demarcación correspondientes al ejercicio 2020, por un importe total de 210.000 euros. Ello supone una subvención de hasta el 16% del coste, que las comisiones ya tienen abonado en sus cuentas.
AUTONOMÍA MUNICIPAL PARA EL USO DE LOS REMANENTES
La Junta ha aprobado también una moción conjunta del alcalde y el concejal de Hacienda en la que se reclama de nuevo al Estado que los ayuntamientos tengan disponibilidad total sobre el uso de sus remanentes de tesorería. En estos momentos, el Estado ha permitido que las entidades locales puedan dedicar un 20% de sus remanentes a la lucha contra la Covid-19, pero desde los municipios se considera insuficiente, y se exige la capacidad para disponer de ello sin tutela. El vicealcalde Campillo ha manifestado "el hartazgo de los ayuntamientos de ser siempre el hermano pequeño de las administraciones públicas", y ha denunciado "esa tutela que ejercen administraciones incumplidoras sobre los ayuntamientos, que sí cumplen las pautas de gasto y de saneamiento presupuestario", ha afirmado. Además, la moción reclama también al Gobierno "que se avance en la liquidación definitiva de la participación en los ingresos del estado del IVA de diciembre de 2017 incorporado a 2018, y que el Ayuntamiento de València ha dejado de ingresar, para poder destinar este importe a aspectos relacionados directa o indirectamente con la pandemia". También se propone que el uso de los remanentes no compute en la llamada ‘regla del gasto’, y que se revise el cómputo del periodo medio de pago a proveedores."LOCA PERSECUCIÓN"
Finalmente, el vicealcalde se ha referido a un asunto "que puede parecer menor, pero que supone un gasto innecesario para el Ayuntamiento, y que viene derivado directamente de la loca persecución del PP contra el Gobierno Municipal mediante las denuncias continuadas a los concejales, que tiene consecuencias sobre el dinero público". Campillo ha explicado que es el asunto de las numerosas denuncias impulsadas por un asesor del Grupo Municipal Popular "que actualmente forma parte del Grupo y cuya actuación el PP hemos de suponer que asume, por tanto, como propia", ha afirmado.Se trata de un buen número de denuncias, ha continuado Campillo, que los tribunales han ido desestimando, pero que suponen un gasto para el Ayuntamiento puesto que, según la doctrina del Tribunal Supremo, al tratarse de demandas contra ediles en tanto que cargos públicos, no de manera personal, ha de asumir el Ayuntamiento. De hecho, así ha constado hoy mismo en la Junta de Gobierno, tras una denuncia al concejal Carlos Galiana.
"Querer esta ofensiva a cualquier coste y querer hacer creer lo que no es cuesta dinero a los valencianos, un dinero que estaría mejor empleado en luchar contra la Covid-19 y sus efectos", ha afirmado Sergi Campillo. El vicealcalde ha asegurado que el PP "debería pedir disculpas a toda la ciudadanía por esta persecución obscena, injustificada y que tiene consecuencias económicas".