El president de la Generalitat, Ximo Puig, se ha mostrado partidario de acelerar las inversiones que permitan aprovechar los fondos europeos para favorecer una transición energética sostenible.
El president ha realizado estas declaraciones durante su participación en la apertura del 'II Ecofòrum Comunitat Valenciana. La economía circular, clave en la lucha contra el calentamiento global'.
El responsable del Consell ha señalado que "la Administración no puede ser un cuello de botella" que frene inversiones, y ha recordado que los tres grandes ejes de la estrategia europea para la recuperación pasan por la digitalización, la sostenibilidad y la resiliencia.
Ximo Puig ha añadido que la Generalitat está decidida a tener un papel activo en la agilización de las inversiones susceptibles de ser financiadas por la UE y ha enmarcado en este objetivo la decisión de que los proyectos que impulse la Generalitat con cargo a los fondos europeos se tramiten por la vía de emergencia.
En el ámbito de la sostenibilidad, el president ha destacado proyectos importantes como el de la intervención integral en la gestión de aguas residuales con el objetivo de reutilizarlas al 100%, por valor de más de 1.000 millones de euros, o la modernización del sistema de regadío, así como también la estrategia del hidrógeno verde, con "gran impacto en Castellón y en toda la Comunitat Valenciana gracias al apoyo de las empresas y sectores que participan en este foro".
Tal y como ha expuesto el jefe del Consell, en 2025, las renovables serán ya la primera fuente global de generación eléctrica, y la Comunitat Valenciana quiere ser partícipe de este cambio, porque las energías limpias "son una exigencia".
El president, que ha subrayado la relevancia de establecer en este ámbito "alianza" entre sector público y sector privado, ha defendido que "es el momento de situar en la agenda la sostenibilidad".
"No podemos decirle al planeta: 'Vuelva usted mañana', ha agregado Puig, quien ha recordado que la necesaria "revolución verde" fue iniciada por los y las jóvenes, lo que constituye una muestra de un cambio histórico de mentalidad y también un signo de esperanza.