Protectoras y asociaciones luchan por los animales y por su propia supervivencia en plena alerta

Empren qüestionaris "exhaustius" per a evitar casos de persones que volen adoptar un gos per a poder eixir al carrer

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La alerta sanitaria decretada por la pandemia del coronavirus afecta también a las protectoras de animales arraigadas de norte a sur de la Comunitat Valenciana, y a asociaciones que pusieron en marcha hace ya años novedosos proyectos para fomentar las adopciones. Así, sus responsables y voluntarios se afanan estos días en procurar a los animales la atención necesaria en pleno confinamiento mientras apelan al apoyo de los ciudadanos al ver en algunos casos su propia supervivencia amenazada.

En el caso de la protectora Modepran, que se encarga de la gestión del centro municipal de adopción de València, nada más decretarse el confinamiento anunció en redes sociales que cerraba sus puertas para citas no urgentes y visitas. Las adopciones y acogidas pasaban a gestionarse por teléfono y redes sociales, entregando ellos mismos los animales en el domicilio con todas las medidas de seguridad e higiene necesarias.

"Los animales nos necesitan y nosotros no podemos parar", remarcaba la protectora hace ya una semana, explicando que a partir de entonces los paseos y cuidados de los animales los realizarían los trabajadores y coordinadores de voluntariado autorizados, es decir, los voluntarios veteranos, porque "hacen falta manos" para atender a los más de 500 perros y gatos que acoge el refugio.

La presidenta de Modepran, Amparo Requena, ha explicado a Europa Press que este es "un momento complicado" pero a su vez es una "perfecta oportunidad" para aquellas personas interesadas en acoger o adoptar un animal, ya que al estar más tiempo en casa la habituación a la nueva vida es más fácil.

Respecto a las peticiones de adopción o acogida recibidas en los últimos días y si han detectado casos de personas que quieren adoptar un perro para tener la excusa de salir a la calle, ha asegurado que están teniendo "especial cuidado" y se están empleando cuestionarios "exhaustivos" para evitar esos casos y ha afirmado que "al final se ve quién quiere realmente al animal".

"Se mira más, se pregunta más", ha incidido, al tiempo que ha reiterado que no quieren paralizar posibles adopciones. En el caso de acogidas, se aceptan únicamente las que son de dos meses o más.

Tampoco, según Requena, han notado en la última semana un aumento en el número de abandonos, y esperan que así siga, aunque les han chocado casos como el de un hombre en Paterna que fue multado cuando iba en coche a la casa de una mujer que había dado positivo en coronavirus para sacar a su perro.

A su juicio, la administración va a tener que contemplar este tipo de situaciones, con personas contagiadas e incluso hospitalizadas que necesitarán la ayuda de otros para atender a sus animales. Asimismo, la protectora sigue reclamando ayuda económica a la administración porque con el presupuesto que se le otorga "es imposible gestionar" el volumen de animales que está gestionando.

Desde la entidad agradecen los donativos de los ciudadanos y también comparten en redes sociales sus necesidades de material para que quienes quieren colaborar puedan comprarlo online y sea entregado en el refugio.

EL PASSATGE DELS GATS

También en València se encuentra El Passatge dels Gats, un cat café en el que uno puede tomarse algo acompañado de los gatos que viven en el local a la espera de conseguir una familia definitiva. Sus ingresos principales proceden precisamente de las visitas, así como de la venta del merchandising que está a disposición de los usuarios en el establecimiento.

Por ello, el cierre ha puesto en una situación complicada a este proyecto que nació en 2017 y que ya ha permitido la adopción de cerca de un centenar de felinos.

Su responsable, David, ha ido relatando todos estos días cómo afecta el cierre al proyecto porque hay gastos fijos que afrontar ahora sin ingresos, entre ellos la propia comida o arena que necesitan los felinos. Él se desplaza cada día a darles de comer y ha lanzado una petición en redes sociales para conseguir donaciones y 'teamers' que colaboren con el proyecto desde 1 euro al mes.

La respuesta ciudadana no se ha hecho esperar y David ha agradecido a todos los donantes su "apoyo inmejorable" y la "acogida brutal", que permite que estos inquilinos de cuatro patas sigan teniendo estos días comida y arena.

No obstante, al conocerse la ampliación del estado de alarma otros 15 días, ha lanzado otra petición, ya que los 13 gatos --acostumbrados al contacto diario con las personas que acudían al local-- necesitan cariño. Por ello, se piden casas de acogida para que puedan estar cuidados 24 horas y no solo el rato que él puede permanecer con ellos.

LA FÁBRICA DE HUELLAS

Afectada también se ve La Fábrica de Huellas, un espacio dog friendly en València que cuenta, además, con una zona en la que viven gatos en adopción, que se vio obligado, como el resto de establecimientos, a cerrar como consecuencia del estado de alarma.

La bajada de persiana, según sus responsables, ha puesto "en verdadero peligro este proyecto, que tiene como objetivo favorecer la adopción de gatos sin hogar, educar en la concienciación animal y tenencia responsable y favorecer una interacción humano-animal respetuosa" ya que estando cerrados no pueden asumir los gastos fijos, por lo que han lanzado un SOS a través de las redes sociales.

Así, han lanzado una campaña de microdonaciones para que los ciudadanos realicen una aportación a futuro, para disfrutar su consumición una vez pueda abrirse de nuevo el local, un "adelanto" que han propuesto en forma de bonos que van desde los 10 euros. La mitad de lo aportado será una donación al proyecto y la otra mitad se podrá disfrutar en forma de consumición, en el rincón de repostería perruna o en la tienda solidaria con una validez de 12 meses.

Además, también se pondrá el nombre del donante en 'El muro de la buena gente'. Para aquellas personas de fuera de València que quieran colaborar, con una donación de 10 euros su nombre aparecerá en ese muro, que pretende convertirse en lugar de recuerdo de todos aquellos que ayudaron al proyecto a salir adelante en esta adversa situación.

Por el momento esta campaña de recaudación ha superado las expectativas iniciales, al haber conseguido más de 5.500 euros cuando la meta inicial era de 2.887 euros, lo que supone el 191% del objetivo fijado de antemano.

"Esta persiana volverá a levantarse. Pero no solo porque lo queramos nosotras, sino porque lo queréis un montón de gente más. Y nos lo habéis demostrado consiguiendo en tan solo 48 horas lo que nos habíamos propuesto en 40 días. Sois increíbles. Nuestra campaña de microdonaciones ha llegado a su objetivo y tenemos lo mínimo que necesitábamos para aguantar marzo y abril. Ojalá en mayo podamos teneros a todos aquí", han destacado sus responsables.

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