Coincidiendo con el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, la Comunidad Valenciana da un paso más en la promoción de la autonomía personal con la profesionalización de la figura del asistente personal. La vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, junto con las entidades Cermi, Vicoval y Codifiva, han presentado la campaña ‘No hay límites’ para dar a conocer la figura del asistente personal como un recurso al que pueden acceder las personas con diversidad funcional, en situación de dependencia, que tengan un proyecto de vida independiente.
La figura del asistente personal, todavía desconocida, se alza como la mejor apuesta para “fomentar la independencia y la autonomía de las personas con diversidad funcional”, ha explicado Oltra. Se trata de un recurso altamente demandado por las entidades, que ha estado olvidado durante mucho tiempo, pero que la idea es que “cada vez haya más personas beneficiarias de este servicio de asistencia personal”.
En este sentido, las entidades que se han implicado en la profesionalización de la figura del asistente personal, han querido expresar que “es de gran ayuda para poder llevar una vida normal, pero, sobre todo, independiente. Ellos están para apoyarnos en la rutina diaria, pero nosotros somos los que decidimos dónde queremos ir, qué queremos comer o con quién queremos ir, y eso es muy importante”.
La figura del asistente personal se ha incluido en el catálogo de servicios y prestaciones de la Ley de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a la Dependencia, permitiendo la contratación de un o una asistente personal para facilitar a la persona beneficiaria el acceso a la educación, al trabajo, a las actividades diarias, así como apoyarle en su participación en la comunidad.
Los requisitos que deberán cumplir las personas beneficiarias serán: tener un grado de dependencia reconocido; no superar los 64 años de edad o, en caso de superarlo, justificar un proyecto de vida independiente. Las personas beneficiarias tendrán libertad de contratación, pero tendrán que contar con un informe social que determine la adecuación de este recurso.
En cuanto a los requisitos para ser asistente personal, se establece la obligatoriedad de estar empadronado en la Comunidad Valenciana; ser mayor de edad; no tener parentesco con la persona beneficiaria hasta el cuarto grado; y disponer de la formación requerida para desempeñar este cargo.
Finalmente, se especifica que, entre las funciones del asistente personal, se incluye la atención a las tareas personales y/o domésticas de la persona dependiente, pero sin superar el 30% del servicio, ya que la labor principal de esta figura será el acompañamiento en la realización de gestiones personales fuera del hogar; el apoyo en la planificación del día a día; y la inclusión del beneficiario en la comunidad. Y es que este servicio, como ha apuntado Oltra, debe diferenciarse del servicio de ayuda a domicilio.
La persona en situación de dependencia que cuente con la figura del asistente personal podrá ser beneficiario del servicio de teleasistencia, así como de los servicios o prestaciones de promoción de la autonomía, excepto el de las viviendas tuteladas.