El valenciano Ramón Martínez-Máñez ha sido galardonado con el premio Rei Jaume I de Nuevas Tecnologías, que patrocina el Ayuntamiento de València. Su nombre, y el del resto de los premiados en esta edición en que los Jaume I cumplen 30 años, se ha dado a conocer en un acto celebrado en el Palau de la Generalitat, al que ha asistido el alcalde de València, Joan Ribó.
«La aportación de Ramón Martínez-Máñez entronca con los valores que representa nuestra ciudad: la preocupación por la salud y por una alimentación saludable, entre otras investigaciones», ha afirmado el alcalde de València, Joan Ribó, tras conocer el nombre del galardonado. «La aplicación de las nuevas tecnologías para mejorar la vida de las personas es el mejor camino de un entendimiento necesario entre las instituciones y la ciencia. La apuesta por la innovación y por la investigación ha de ser una obligación de las administraciones que tienen capacidad para desarrollar políticas activas que fomentan la I+D+i», ha añadido Ribó.
Ramón Martínez-Máñez tiene 54 años y es doctor en Ciencias Químicas, catedrático en el Departamento de Química de la Universitat Politècnica de València, director del Instituto Interuniversitario de Investigación de Reconocimiento Molecular y Desarrollo Tecnológico (IDM) y director científico del CIBER-BBN del Instituto de Salud Carlos III. A lo largo de su amplia trayectoria docente e investigadora ha coordinado 99 proyectos nacionales e internacionales, y ha publicado un total de 393 artículos en diferentes revistas científicas de alto índice de impacto.
Durante más de 25 años ha trabajado en el diseño de sondas moleculares y sensores químicos que permiten observar modificaciones en las moléculas. De este modo ha logrado sensores muy fiables para el diagnóstico clínico, cambios en el medio ambiente y control de la calidad alimentaria, con aplicaciones en agricultura y nanotecnología, campos en los que sus investigaciones han sido pioneras. El jurado del Premio Rei Jaume I de Nuevas Tecnologías ha valorado esas «contribuciones excepcionales» de Ramón Martínez-Máñez en el desarrollo de nanosensores con aplicación en tecnología de los alimentos y la medicina, así como «la alta calidad científica e impacto social de su trabajo».
El resto de los Premios Rei Jaume I de esta 30 edición han correspondido al empresario valenciano Enrique Silla Vidal, Premio Rei Jaume I al Emprendedor, cuya empresa se ha convertido en «líder del mundial de tecnologías ecológicas y sostenibles para el sector textil»; a la castellonense Dolores Corella Piquer, catedrática de Medicina Preventiva y Salud Pública en la Universitat de València, Premio Rei Jaume I de Investigación Médica «por su trabajo pionero en el nacimiento y desarrollo del campo de la genómica nutricional»; Xavier Freixas Dargallo, catedrático de la Universitat Pompeu Fabra, que recibe el Premio Rei Jaume i de Economía al ser reconocido por el jurado como «uno de los principales expertos mundiales en economía financiera»; María Vallet Regí, fundadora y directora del Grupo de Investigación de Biomateriales Inteligentes de la Universidad Complutense de Madrid, a la que se concede el Premio Rei Jaume i de Investigación Básica «por sus trabajos pioneros en el campo de materiales cerámicos mesoporosos con aplicaciones biomédicas, particularmente en la regeneración del tejido óseo», e Iñigo Losada Rodríguez, catedrático de la Universidad de Cantabria, Premio Rei Jaume I a la protección del Medio ambiente «por su importante contribución a la mejora del medio ambiente y a la lucha contra el cambio climático».