El Partido Popular de la ciudad de València utiliza datos aislados sobre la Albufera, fuera de contexto, para acusar al Botànic y al Rialto de abandonar el Parque Natural. Ello pese a que el mismo Partido Popular negó el caudal ecológico al lago desde Madrid y que, aunque gobernó en la ciudad 21 años y 20 en la Comunitat, es ahora cuando presenta el mejor estado desde su "colapso ambiental" en los años 70.
El rifirrafe, nacido en Twitter, surgió tras una publicación de la líder local popular, María José Català. En ella, citando un reportaje de un suplemento de Las Provincias, señalaba el "tesoro medioambiental" de València "se encuentra enfermo": "O le ponemos una solución real ya, o lo lamentaremos. Nosotros y las generaciones del futuro". Algo que Sergi Campillo, concejal de Conservación de Áreas Naturales y Devesa-Albufera, criticó duramente.
En respuesta a Català, señaló que el PP ha "estado muchísimos años en el Gobierno Central y jamás" aprobó "el caudal ecológico para la Albufera del Júcar": "¿Y ahora te atreves a lamentarte, después de negar el agua para nuestro Parque Natural?", asevera.
Es precisamente el caudal que llega a la Albufera desde el río Xúquer, principal fuente de agua del lago desde hace siglos, uno de los factores más importantes para la recuperación de este. Sin embargo, la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), dependiente del Gobierno de España, no tiene fijado un caudal mínimo para el parque, más allá de excedentes. "Hipocresía máxima", señalaba Campillo sobre la publicación de la dirigente popular.
Negociaciones
Según señala Campillo, aunque la Albufera sí que está enferma, hay señales para el optimismo. Según los datos oficiales que maneja el Ayuntamiento y la Generalitat, los valores de clorofila-a en el lago eran cambiantes en cuanto a ascensos y descensos. Es a partir de 2010 cuando parece estabilizarse y a partir de 2015, especialmente, cuando los valores inician una marcada tendencia a la baja. Estos análisis son indicativo del nivel de algas microscópicas en el agua, señal de contaminación por exceso de nutrientes y, a su vez, de la transparencia del agua. "La Albufera está en el mejor momento de los últimos 40 años, con datos objetivos en la mano. Sólo falta que el Gobierno Central acepte una dotación hídrica ecológica", señaló Campillo en las redes.
El Concejal ha asegurado que, conscientes de la situación del parque, están en "negociaciones" con la CHJ para acordar un "caudal estable" y "ecológico" para la Albufera. Una necesidad que contrasta con los 400 hectómetros anuales que llegaban al lago hace 40 años, un 400% más que en la actualidad.
El "camino iniciado" con la Confederación detalla una aportación de "8 hectómetros cúbicos sobrantes de la Comunidad de Regantes de Sueca y la Acequia Real del Júcar por la modernización de los sistemas de regadío". Un caudal que ayudaría a la recuperación del parque pero se quedaría, todavía, lejos de lo deseado: "Como mínimo se necesitan 70 hectómetros anuales para conseguir el buen estado ecológico".