Los candidatos de las dos principales formaciones de la derecha valenciana han propuesto eliminar medidas anticorrupción llevadas a cabo por el Govern del Botànic. La popular Isabel Bonig prometió el pasado viernes eliminar la Agencia Valenciana Antifraude (AVA) y Toni Cantó, de Ciudadanos, aseguró un día antes que en caso de llegar al Gobierno eliminará la Conselleria de Transparència.
La aún Vicepresidenta de la Generalitat, Mònica Oltra, se preguntó el viernes tras la reunión del Consell "por qué algunos se lo quieren poner menos difícil a los ladrones y a los corruptos".
Cantó lanzó un compromiso el pasado jueves, desde Alacant y junto a la candidata de su formación por Barcelona, Inés Arrimadas: reducir de diez a siete las consellerias porque así se eliminan "enchufados, chiringuitos, fundaciones y organizaciones pancatalanistas con un odio a lo español". Junto a ese mensaje, añadió que "una de las consellerias a eliminar es Transparencia, que tiene un presupuesto de 49 millones". Cantó ve innecesaria la Conselleria encargada de la dirección y ejecución de la política de transparencia, participación ciudadana y responsabilidad social de la Administración. Asegura que, con su coste, podría contratar "900 médicos".
Al día siguiente Bonig tomó un discurso semejante y también hablo de eliminar "chiringuitos". Asegura, igual que desde Ciudadanos, que la Administración ha 'engordado' en exceso y que borrará el "gasto superfluo". Es para ella uno de estos gastos las "agencias sinsentido" como la Agencia Antifraude y la Agencia Valenciana de la Innovación. Según la popular a la lucha contra la corrupción no hay que dedicarle un organismo independiente y se debería reforzar mecanismos internos de la Generalitat como la abogacía. Para la candidata estos organismos "sólo aportan grasa" a la Administración Pública, por lo que promete "adelgazarla".
Ponerlo difícil a los ladrones
Oltra, al ser preguntada por estas declaraciones, aseguró que tanto la Conselleria de Transparència como la AVA "han hecho un trabajo extraordinario" sobre lo que "hacía falta en este comunidad", que era "desterrar la corrupción generalizada de las instituciones". "Es todo un sistema normativo que tiene como objetivo principal la prevención de la corrupción, porque una vez se ha producido ya ha manchado la democracia y dañado a los ciudadanos y ciudadanas", ha recalcado.La Agencia empezó a configurarse con la llegada del Botànic en 2015 porque, tal y como se asegura en la misma Ley de su creación, "muchas de las causas de la corrupción" suceden "por no haber creado mecanismos reales de participación ciudadana en el control eficaz de las instituciones". Se trata de un organismo en la prevención pero con potestad sancionadora y que "protege a quienes denuncien la corrupción", asegura Joan Llinares, Director del ente.
La también Consellera de Igualdad ha aprovechado para recordar el informe de la Unión Europea en el que se destaca la Comunitat como "el territorio de España donde se ha creado toda una serie de normativa e instituciones encargadas de prevenir la corrupción": "En vez de plantear que se tiene que investigar para ver dónde ha ido el dinero del Banco Europeo de Inversiones... No estaban ni los colegios construidos", ha recordado Oltra.
Ayer saltaba la noticia de un posible caso de corrupción en las formaciones a parados que abarcaría varias Comunidades. La investigación se inició por una denuncia de un grupo de docentes y un informe de la AVA.
"Las formaciones políticas que quieran eliminar la prevención de la corrupción... Pues igual tienen sus razones", ha iniciado la Vicepresidenta. Aseguró que "claro" que si hay "una agencia antifraude, una Conselleria de Transparència y un sistema de alertas anticorrupción (Satán)" se pone "más difícil" la situación "a los ladrones". "¿Quien no se lo quiere poner difícil a los ladrones? ¿Por qué?", preguntó Oltra. Es algo que, asegura, tendrán que responder los que lo quieren poner más fácil. "Dos y dos son cuatro. Si quitas el Satán, dos y dos son tres, y te falta uno", concluyó.