La portavoz adjunta del PSPV en Les Corts y también miembro del equipo negociador del Botànic II, Carmen Martínez, se ha mostrado convencida de que Ximo Puig será investido presidente este miércoles porque "las cosas no están tan mal como parece" en una negociación "hasta ahora impecable", con amistad entre las personas y en la que "no ha habido ningún momento de tensión irreparable".
Así se ha pronunciado Martínez en la rueda de prensa posterior a la Junta de Síndics al ser preguntada sobre la situación de las negociaciones entre PSPV, Compromís y Unides Podem para conformar un nuevo Botànic --que continúan en marcha-- teniendo en cuenta que el pleno de investidura se celebra este jueves, y después que la portavoz adjunta de Compromís, Aitana Mas, haya aludido a la "humillación" que percibe la coalición al pedírsele la cesión de más y más competencias.
"Todas las negociaciones tienen liturgias de ruptura, de 'me levanto de la mesa', es lógico también y todos lo que estamos allí somos expertos negociadores. Tardamos 30 días en hacer el primer pacto, de momentos no llevamos tanto tiempo, es verdad que esperábamos haber acabado antes y que el cansancio también va haciendo mella en este caso", ha apuntado la socialista.
En todo caso, y pese a esas "liturgias que siempre hay que agotar", ha afirmado que "las cosas no están tan mal como parece" y está convencida de que va a haber un acuerdo durante el día de hoy y que el miércoles por la tarde Ximo Puig será investido presidente.
Respecto al sentimiento de "humillación" de Compromís, ha indicado que ella será "muy prudente" en sus adjetivaciones y, además, es optimista, ya que "existe por parte de Compromís, Unides Podem y PSPV una voluntad firme, no va a ser posible que sea de otra manera, no cabe otra opción".
Esos adjetivos son, a su juicio, quizá fruto del cansancio o de esa liturgia de las negociaciones, porque a veces "es necesario tensionar", pero "a lo mejor están de más en este momento" y ella no quiere contribuir a generar más tensión.
A Martínez, no obstante, le han sorprendido esas palabras, que considera "un poco fuertes" ya que, pese a no conocer el estado de las negociaciones durante la mañana --no ha podido ir al estar en Corts--, hasta ahora el ambiente "ha sido absolutamente cordial, de camaradería, de alegría" y aunque ha habido momentos de falta de acuerdo, se han abordado "con absoluto respeto".
PACTO "DE SEÑORAS Y CABALLEROS" DE PALABRA
Preguntada si ve factible la firma del acuerdo en Alicante esta tarde, ha indicado que no lo sabe pero que, personalmente, lo ve difícil. "No descartaría nada", ha dicho, pero "es complicado por la logística" simplemente si se llega a un acuerdo a última hora.No obstante, ha explicado que en algún momento en la mesa negociadora se ha hablado de que "la palabra de las personas también sirve y a lo mejor es suficiente aunque se posponga la firma para un momento protocolario posterior". "Eso es una opinión personal y arriesgada, incluso --ha matizado--pero tal vez se pueda hacer un pacto de señoras y caballeros y una firma posterior, esas cosas también son posibles".