El PSOE quiere que el Tribunal de Cuentas fiscalice la contabilidad de Vox en los ejercicios de 2018 y 2019, con especial atención a sus finanzas en la provincia de Valencia, para determinar si el partido de Santiago Abascal puede haber incurrido en alguna infracción administrativa.
Con este objetivo los socialistas han registrado una propuesta dirigida a la Comisión Mixta para las Relaciones con el Tribunal de Cuentas, que será, en definitiva, la que decida si mandata o no expresamente al fiscalizador a revisar la contabilidad de Vox en esos años.
El Tribunal de Cuentas ya fiscaliza la contabilidad anual de los partidos con representación parlamentaria y de las fundaciones que tienen vinculadas, así como sus contabilidades electorales. Así, el partido que lidera Santiago Abascal ya se ha sometido a exámenes por sus cuentas de campaña, si bien todavía no ha aparecido en los informes anuales del Tribunal dado el retraso que arrastra la institución, cuyo último informe aprobado es de 2O16, cuando Vox aún no tenía representación en el Congreso.
FISCALÍA NO VIO DELITO
Los socialistas justifican su iniciativa, a la que ha tenido acceso Europa Press, en la denuncia que una antigua militante de Vox dirigió el 7 de julio de 2020 a la Fiscalía Anticorrupción del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana.
La denunciante, recuerda el PSOE, aseguraba haber sido testigo de la existencia de una financiación irregular de la formación que preside Abascal. Aunque los socialistas señalan en su propuesta que la Fiscalía concluyó que "no había indicios de delito", pero destacan que remitió copia al Tribunal de Cuentas para que analizara los hechos.
Por ello, interpretan que el ministerio público instó al fiscalizador a determinar si Vox podría haber incurrido en "alguna de las infracciones administrativas contempladas en el artículo 17 de la Ley de Financiación de Partidos Políticos".
Por todo ello, ahora busca que la Comisión Mixta Congreso-Senado para las Relaciones con el Tribunal de Cuentas encomiende a este órgano "la realización de una fiscalización de la contabilidad del partido político Vox referida a los ejercicios 2018 y 2019".
El PSOE especifica que esa fiscalización deberá prestar "especial atención" a los hechos remitidos al tribunal en julio de 2020 por la Fiscalía de Valencia.
La ex militante que presentó la denuncia después archivada dio cuenta de donaciones en metálico al partido y habló incluso de la existencia de una supuesta caja b de la formación en la provincia de Valencia.