La vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, ha afirmado que el anteproyecto de Ley de Igualdad de Género nace como un texto "adaptado a la sociedad valenciana del siglo XXI", en el que se apuesta por "luchar contra la brecha salarial, pero también la brecha en los cuidados adoptando medidas de acción positiva respecto al género infrarrepresentado".
Oltra ha presentado el anteproyecto, que inicia el proceso de audiencia e información pública, y que ha definido como un texto "ecofeminista que sitúa la buena vida al centro" y busca impulsar "un cambio de paradigma y transformación feminista de la sociedad", que afecta especialmente a las mujeres "pero no solo a ellas".
El anteproyecto de ley supone "una apuesta por una igualdad real entre hombres y mujeres", que permita tanto la incorporación de mujeres a profesiones tradicionalmente masculinizadas, como la presencia de hombres en espacios mayoritariamente feminizados, además de introducir un módulo sobre igualdad de género en aquellos ciclos de formación profesional donde los hombres son mayoría.
"Los hombres también han encontrado espacio e implicarse en las políticas de los cuidados, y por eso este proyecto normativo fomenta la discriminación positiva para ellos", ha explicado la vicepresidenta, quien ha apuntado que con este objetivo se contempla que la Administración pueda "ampliar las reducciones horarias para la crianza y los cuidados, cuando lo pida el género infrarrepresentado".
Asimismo, se contempla aplicar una bonificación fiscal a las empresas que incluyan medidas de compensación positiva al género infrarrepresentado, y en el ámbito de la corresponsabilidad se propone ampliar la universalidad a toda la red de 0 a 3 años, atención extracurricular complementaria en infantil y primaria y la promoción de la provisión universal y pública de los cuidados a través del Sistema Público Valenciano de Servicios Sociales.
La elaboración de una estrategia de usos del tiempo y corresponsabilidad, y premiar en la contratación pública a las empresas que fomenten las jornadas de 32 horas son otras de las medidas que incluye la ley.
Cambio de paradigma
Oltra ha señalado que la ley también quiere impulsar "la necesidad de un cambio de paradigma productivo, que permita avanzar hacia la economía de las tres C", y por ese motivo se avanza en el reconocimiento del trabajo doméstico y los cuidados, "teniendo en cuenta su valor a la hora de diseñar las políticas y los presupuestos públicos".
En este sentido, ha mencionado medidas como incentivos fiscales para aquellas personas que contraten de forma indefinida a personas afiliadas en el sistema especial de empleadas de hogar, o poner fin a la externalización de los servicios de limpieza, alimentación y lavandería de los centros sanitarios, educativos y de servicios sociales de carácter público.
La vicepresidenta ha apuntado que en esta línea también se plantea que las empresas o entidades del sector hotelero que externalicen los servicios de cocina, limpieza y lavandería no puedan participar en los procedimientos de contratación pública, ni recibir ayudas o subvenciones públicas.
Asimismo, la Generalitat se compromete a fomentar la mejora de las condiciones de salud laboral de las camareras de piso, así como el equipamiento de las habitaciones de hotel con mobiliario que evite las enfermedades profesionales en este colectivo.
Lucha contra la brecha salarial
La vicepresidenta ha indicado que otro de los hitos del anteproyecto de ley es las medidas para luchar contra la brecha salarial, estableciendo que las empresas con más de 50 personas trabajadoras que quieran contratar con la Administración o recibir fondos públicos, deberán de publicar sus tablas salariales por género y edad.
Oltra ha explicado que también fija que el Consell y las listas electorales valencianas deban ser paritarias por ley y se establece que, en el caso de existir igualdad de capacitación, se deberá dar prioridad al sexo infrarrepresentado en aquellos cuerpos, niveles y categorías de la Administración en los cuales su representación sea inferior al 40%.
Las normas deberán contar todas con un informe de impacto de género, y la perspectiva de género estará presente en las políticas de medio ambiente, agricultura y vivienda.
La vicepresidenta ha señalado que de esta manera se considerará la vivienda como una herramienta para luchar contra la feminización de la pobreza, "garantizando a las mujeres el derecho preferente en el acceso a las viviendas de promoción pública".
Por otra parte, en el ámbito sanitario se garantiza la humanización de la gestación y el parto, estableciendo la obligación de informar a las mujeres de las diferentes opciones de parto; se garantizará el acompañamiento en aquellos casos de muerte natal y perinatal; así como el reparto de productos de gestión menstrual en los colegios.