La vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Aitana Mas, ha aplaudido la apuesta del gobierno de Islandia por unas políticas de apoyo a la conciliación y a la familia y de protección a la infancia y las ha situado como "referente internacional" para el desarrollo de las familias y de una sociedad "cohesionada socialmente".
Aitana Mas ha realizado un balance "positivo y enriquecedor" del viaje institucional que ha realizado esta semana a Islandia para conocer "de primera mano" las políticas de su gobierno en materias relacionadas con el departamento que dirige, ha indicado la Generalitat en un comunicado.
Entre otros asuntos, la vicepresidenta ha conocido la importancia que concede el gobierno islandés a la conciliación entre vida familiar y laboral y cómo "ha impregnado todas las esferas de la política" de medidas "encaminadas a conseguirla".
En este sentido, ha calificado la jornada laboral de cuatro días instaurada por la administración nórdica en el sector público como "una exitosa experiencia" que ha recalcado que "puede ser de mucha utilidad para importarla a la Comunitat Valenciana la próxima legislatura" como un "proyecto experimental de reducción de jornada laboral entre el funcionariado".
Las medidas de conciliación, ha asegurado la vicepresidenta, "generan satisfacción en el lugar de trabajo, seguridad personal y económica y, además, aumentan el rendimiento de las trabajadoras y los trabajadores".
En su viaje a Reikiavik, Aitana Mas ha mantenido un encuentro con el ministro de Infancia y Educación de Islandia, Áxmundur Einar Daoason, con el que ha compartido las distintas políticas en estas materias implantadas por el Consell en la Comunitat Valenciana, como los consejos infantiles impulsados desde Igualdad para dar voz a los problemas de los niños, niñas y adolescentes.
MODELO BARNAHUS
Durante su visita a Islandia, Aitana Mas también ha conocido el modelo islandés Barnahus o 'Casa de los Niños', un servicio de atención integral a la infancia y adolescencia víctima de abusos sexuales y violencia, habitual en los países nórdicos y promovido por organismos como el Consejo de Europa o la ONU y entidades como Save the Children.
Según ha anunciado la vicepresidenta esta semana, está prevista su implantación en Castelló de la Plana como un "programa piloto" donde en un único servicio todos los departamentos que intervienen en un caso de abuso sexual infantil trabajan "de forma coordinada y bajo el mismo techo", en unas dependencias lejos de comisarías y hospitales que permiten crear un "entorno amigable" para niños, niñas y adolescentes que han sido víctimas de abusos y violencia.
El modelo Barnahus, ha señalado, "es una necesidad si queremos que la Comunitat Valenciana siga la línea de la mayoría de los países europeos y dé un paso adelante hacia la protección de la infancia más vulnerable".
Con este objetivo, a finales de este mes está convocada una reunión con los departamentos de Justicia y Sanidad implicados en su puesta en marcha para mostrarles y explicarles la idea.
En la primera jornada de su viaje a Reikiavik, la vicepresidenta también mantuvo un encuentro con Bragi Gubrandsson, creador del modelo Barnahus y representante del Comité de los Derechos del Niño de la ONU.