La vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Aitana Mas, ha anunciado la creación en 2023 de la Cátedra Inter-universitaria del Sistema Público Valenciano de Servicios Sociales, “un proyecto que nace de la inercia generada por los Laboratorios de Servicios Sociales y que contará este año con un presupuesto de 200.000 euros”.
Se trata de una iniciativa “pionera en el Estado en cuanto que creará cinco cátedras (una en cada universidad pública) que, de manera coordinada, promoverá la investigación y la formación en materia de servicios sociales”, ha señalado.
De esta forma, la vicepresidenta ha destacado que esta cátedra actuará como “complemento perfecto para dar difusión todo el conocimiento que se genere tanto desde los laboratorios como desde la propia cátedra, reforzando así de manera definitiva la mejora continúa con la investigación aplicada en materia de servicios sociales”.
Aitana Mas ha realizado estas declaraciones durante la reunión que se ha celebrado en la Universidad Miguel Hernández de Elche con responsables de la Red de Laboratorios Sociales, de la que forman parte las cinco universidades públicas valencianas así como las diputaciones de Castellón y Valencia, junto con los ayuntamientos de Alicante, Vinarós, Benicarló, Alzira y la Mancomunidad de La Ribera, bajo la coordinación del Institut Valencià de Formació, Investigació i Qualitat (IVAFIQ) para hacer balance de los resultados de las investigaciones realizadas durante 2022.
La vicepresidenta ha destacado el papel fundamental de la Red de Laboratorios Sociales de la Comunitat Valenciana “para consolidar un Sistema Público de Servicios Sociales que sea innovador y vanguardista”, ya que su trabajo permite “acercarnos desde diferentes miradas a las necesidades sociales en nuestro territorio, lo que los hace estratégicos para encontrar soluciones clave y actuar de manera eficaz en cada caso”.
Por ello, ha señalado que los presupuestos de su Departamento para 2023 incluyen una partida de 300.000 euros para seguir consolidando esta red de investigación que ofrece “un conocimiento exhaustivo, riguroso y científico”.
En la reunión, la vicepresidenta ha informado, además, que está previsto este año “sumar nuevos actores” a esta red, con la incorporación de “la Diputación Provincial de Alicante y los municipios del Campello, Mutxamel y San Vicent del Raspeig, con los cuales estamos ahora gestionando la ampliación del Convenio Marco del Laboratorio de Alicante”.
Aitana Mas ha repasado los trabajos realizados hasta el momento por estos laboratorios con 18 proyectos, lo que supone 6.430 horas de trabajo en investigación e innovación. Asimismo, un total de 195 municipios de la Comunitat Valenciana participan en estos proyectos de los que 171 se encuentran en el ámbito rural.
Red de laboratorios sociales
Actualmente, la Comunitat cuenta con cinco laboratorios de servicios sociales que trabajan aspectos como la territorialidad, las prestaciones y su impacto en la sociedad o la tecnología aplicada a los servicios de autonomía personal.
Estos laboratorios son: Ribera Alta, en el que participa la Universitat de València; Benicarló-Vinaròs, con la Universitat Jaume I de Castelló, y el de Alicante en el que está representada la Universidad de Alicante. Recientemente se sumaron los surgidos de los acuerdos con la Universitat Politècnica de València y la Miguel Hernández de Elche.
Se trata de una iniciativa pionera en España que lleva más de cuatro años en marcha para poner en valor y dignificar, desde el rigor científico, el sistema público valenciano de servicios sociales, en colaboración con las universidades públicas.
Los laboratorios se centran en investigación y búsqueda de conocimiento y mejora continua de la calidad en servicios sociales a través de la creación de redes entre todos los actores que participan en el sistema: administraciones públicas (locales, supramunicipales, provinciales y Generalitat), universidades públicas y personas usuarias y profesionales.
Este modelo recibió el reconocimiento internacional, a través del Premio Europeo a la mejor práctica investigadora en Servicios Sociales, concedido por la Red Social Europea en diciembre de 2020.
El proyecto, en definitiva, apuesta por una actividad investigadora independiente, planificada y ejecutada en red, complementaria y transferible para la mejora continua de la calidad del sistema público de servicios sociales.
Proyectos sociales en 2022
Respecto a la actividad desarrollada durante 2022, el Laboratorio de Vinaròs-Benicarló ha desarrollado una herramienta de inteligencia artificial, denominada Xatbot inclusivo, para facilitar información sobre los servicios sociales.
Por su parte, el Laboratorio de Alicante ha centrado su trabajo en la investigación aplicada sobre la intervención profesional en los servicios sociales de atención primaria y sus estrategias de mejora, contando con la participación de las personas usuarias, analizando las organizaciones idóneas y generando conocimiento en aspectos como la salud y las condiciones laborales así como las posibles maneras de mejorarlas, para lo que han contado con la colaboración de cuatro ayuntamientos de la Comarca de l'Alacantí.
El Laboratorio de la Ribera Alta de la Universitat de València ha abordado en 2022 líneas de investigación centradas en el envejecimiento activo, destacando la importancia de fomentar programas de ocio o mejorar las comunicaciones dentro del municipio para prevenir el aislamiento, más encara después de la crisis provocada por la COVID-19.
Por otro lado, el Laboratorio de la Universidad Miguel Hernández de Elche ha estudiado la optimización de los recursos en la gestión de los centros de estimulación temprana o los centros de atención a personas con problemas de salud mental a través de una herramienta de monitorización denominada ‘Moises’ que permite, con un sistema informático, facilitar el seguimiento y análisis de indicadores de funcionamiento interno, contando también con la percepción y las opiniones de responsables, personas trabajadoras y personas usuarias de los centros.
Finalmente, el Laboratorio de la Universitat Politècnica de València ha monitorizado con sensores de movimiento el domicilio de una muestra de personas mayores para conocer los patrones diarios de cada una de ellas. El sistema se ha demostrado especialmente útil para dar aviso a los familiares o a los profesionales de servicios sociales en caso de detectar alguna anomalía.