“Si una cosa tengo clara es que la igualdad debe ser el motor de la política del siglo XXI, en todos los campos, en todos los ámbitos, de manera transversal”. Así se expresaba este pasado fin de semana Aitana Mas, candidata de Compromís a Les Corts por la circunscripción de Alicante, en el acto central de campaña de la coalición valencianista. Un acto en el que quedó patente que, precisamente, la Ley valenciana de Igualdad será la primera norma que apruebe el tercer Botànic, en caso de revalidad la mayoría el próximo 28 de mayo.
Una ley que, para la también vicepresidenta y portavoz de la Generalitat y consellera de Igualdad y Políticas, “impulsará un feminismo de clase, facilitará la corresponsabilidad y las relaciones igualitarias, hablará de medidas importantes como que haya casas de parto en todos los hospitales públicos valencianos donde se termine con la violencia obstétrica, permitirá diseñar un plan con las empresas para que avancen hacia el incremento de la participación de las mujeres en órganos de decisión, o que subvencionemos cinco meses antes del parto a una mujer autónoma para que no deba elegir entre ser madre o perder su cartera de clientes”.
Gracias al proceso participativo mediante el cual se está elaborando, la ley permitirá transformar el modelo productivo “con políticas públicas que fomenten la conciliación y amparen también a las nuevas masculinidades”, incide Mas.
Bonificaciones fiscales y lucha contra la brecha salarial
Uno de los aspectos destacados de esta ley es la aplicación de bonificaciones fiscales a aquellas empresas que adopten medidas de compensación positiva hacia los géneros infrarrepresentados. De esta manera, se busca incentivar a las empresas a promover la igualdad de oportunidades y eliminar las barreras que dificultan la participación plena de las mujeres en el ámbito laboral.
La ley también se enfoca en combatir la brecha salarial entre hombres y mujeres. Para ello, se implementarán medidas y herramientas que fomenten la transparencia retributiva, como la obligación para las empresas con más de 50 empleados de publicar sus tablas salariales desglosadas por género y edad. De esta manera, se podrá identificar y abordar las desigualdades salariales de forma más efectiva.
Políticas públicas para la conciliación y el tiempo de cuidado
La Ley de Igualdad en la Comunidad Valenciana también contempla políticas públicas orientadas a la conciliación de la vida laboral y familiar. Se promoverá el descanso en días festivos para el sector del comercio, se impulsará la jornada laboral de 32 horas manteniendo los derechos laborales y salariales, y se fomentarán políticas de flexibilización horaria y promoción del teletrabajo con perspectiva de género. Además, se establecerán permisos de nacimiento, acogida y adopción de 6 meses como mínimo en familias biparentales y hasta 12 meses en familias monoparentales.
La ley reconoce la importancia de los cuidados como elemento fundamental para la sostenibilidad de la vida. Se estima el valor económico y social de los cuidados y su impacto en el Producto Interno Bruto (PIB). Para promover la igualdad en los cuidados, se adoptarán medidas de acción positiva, como reducciones horarias para crianza y cuidados, que se ampliarán una hora diaria cuando sea solicitado por personas del género infrarrepresentado. También se otorgarán bonificaciones fiscales a las empresas que incluyan medidas de compensación positiva en este ámbito.
Igualdad de género interseccional y acceso a productos de higiene menstrual
La ley acoge medidas para fomentar la coeducación en las escuelas y la incorporación de la perspectiva de género en las políticas relacionadas con el medio ambiente, la agricultura y la vivienda. Además, se trabajará para que el acceso a productos de higiene menstrual sea universal, priorizando aquellos que sean sostenibles medioambientalmente.
La Ley de Igualdad en la Comunidad Valenciana representa un paso importante hacia una sociedad más equitativa y libre de discriminación de género. Con la implementación de políticas públicas y medidas concretas, se busca promover la participación igualitaria de mujeres y hombres en todos los ámbitos, así como valorar y reconocer los cuidados como una tarea fundamental para la sostenibilidad de la vida.