Las Fallas vuelven a la normalidad con el único requisito de la mascarilla

No habrá control de aforo para la mascletà y los participantes en la ofrenda lo podrán hacer sin mascarilla

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El president Ximo Puig, reunido con los expertos para establecer las medidas sanitarias
El president Ximo Puig, reunido con los expertos para establecer las medidas sanitarias

Las Fallas de 2022 vuelven a la normalidad precovid con el único requisito de la mascarilla, que será obligatoria en interiores y en el exterior siempre que haya aglomeraciones y no se pueda mantener la distancia interpersonal.

El president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha comparecido ante los medios de comunicación para explicar las medidas sanitarias acordadas para la celebración de las Fallas, Magdalena y Moros y Cristianos, tras reunirse con la secretaria autonómica de Salud Pública y la directora y subdirectora de Salud Pública.

Este marco de recomendaciones indica que en las 20 mascletás previstas no habrá control de aforo, pero será obligatorio el uso de mascarilla, igual que para los asistentes como público a la ofrenda, no siendo obligatoria para los falleros y falleras que desfilen en este tradicional acto.

En el caso de las carpas, se establecerán las medidas establecidas para la hostelería, una normativa que se revisará en los próximos días y que concretará si es necesario dividir a los falleros y falleras en mesas de 10 o si, por el contrario, desaparece esta norma. Asimismo, se aplicarán las especificaciones previstas para exteriores en el caso de contar con dos aperturas que garanticen una correcta ventilación, y se establecerán las medidas de interiores cuando se cierren. 

En cuanto a verbenas y discomóviles, se seguirán también las normas establecidas en el caso del ocio nocturno, con un uso obligatorio de mascarilla a excepción de cuando se consuman las bebidas.

Unas normas que, según el president se establecen para que “haya fiestas con la máxima seguridad posible, lo más reales posible, porque es necesaria una recuperación económica, social y emocional, pero siendo prudentes porque la pandemia aún está entre nosotros”.

En este sentido, Puig ha remarcado que “estamos en un momento en el que se constata un descenso masivo en el número de contagios y, en consecuencia, una bajada en hospitalizaciones y en UCI, pese a tener aún una letalidad alta”, y ha pedido seguir con “la prudencia y la corresponsabilidad, única posibilidad junto a la vacuna para ir avanzando hacia la normalización”.

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