Toni Saura llegó a la alcaldía de Alaquàs tras las elecciones municipales de 2019. Ahora, después de que el Partido Socialista volviera a ser la fuerza más votada en los comicios municipales del pasado 28 de mayo, inicia su segunda legislatura como primer edil de esta localidad de la comarca de l'Horta Sud.
Un municipio que Saura quiere que se convierta en una ciudad verde, sostenible, para las personas y accesible. Un objetivo a largo plazo por el que trabaja cada día, aunque en esta nueva legislatura lo hace gobernando en minoría tras no llegar a un acuerdo de gobierno progresista con Compromís.
Conversamos con Saura en su despacho del edificio consistorial sobre los próximos grandes proyectos que se desarrollarán en la ciudad, la situación de las conexiones en transporte público entre Alaquàs y València y la relación del equipo municipal con la Generalitat y la Diputació.
¿Cómo han sido estos primeros meses de la nueva legislatura?
En cuanto a la gestión, tenemos muchos proyectos empezados que no habian finalizado y durante estos meses lo que hemos hecho es seguir poniéndolos en marcha. La gestión diaria del ayuntamiento ha continuado y los proyectos ya iniciados no entienden de ese parón por las elecciones.
En cuanto a la situación política, nosotros no obtuvimos la mayoría absoluta como teníamos en la legislatura anterior y por eso intentamos llegar a un acuerdo con Compromís. Durante unas semanas estuvimos trabajando para llegar a un acuerdo de legislatura y formar un gobierno de progreso en la misma línea de lo que había sido el Botànic.
Eso finalmente no fue posible y continuamos en la misma dinámica que ya seguíamos en la pasada legislatura, pero teniendo en cuenta que no tenemos mayoría absoluta y por tanto hay cuestiones que ya no dependen solo de nosotros y tendremos que buscar acuerdos y pactar puntualmente con los diferentes grupos políticos.
A la hora de aprobar los presupuestos u otras medidas importantes, ¿buscaréis el apoyo de Compromís?
Evidentemente, el primer partido con el que hablaremos para buscar apoyo será Compromís por afinidad ideológica, sí es que este también quiere llegar a acuerdos. No lo digo por esta, pero en legislaturas anteriores fue muy difícil tratar de llegar a acuerdos con ellos y esperamos que ahora sea diferente y que no solamente seamos nosotros quienes queramos llegar a acuerdos, sino que ellos también quieran. Esa sería la primera opción y hablaremos también con el resto de las fuerzas políticas.
¿Por qué finalmente no se fraguó ese acuerdo de gobierno progresista con Compromís?
No hubo acuerdo porque nosotros consideramos que el mínimo que Compromís estaba dispuesto a asumir superaba lo que nosotros pensábamos que coincidía con la realidad de los resultados electorales. Al final nosotros tenemos un 42 % de apoyo, más de 6600 votos y diez concejales; mientras que ellos tenían dos concejales y no llegaba al 15 % de votos. Entonces, consideramos que el acuerdo tenía que ir en la misma línea que los votos conseguidos para repartir las áreas y fijar los objetivos políticos.
¿Cuáles van a ser los principales proyectos en el municipio para estos 4 años?
Uno de los proyectos que se quedó por acabar en la anterior legislatura es la construcción de un nuevo frontón en el parque del Terç. El proyecto lo teníamos ya redactado, pero la licitación de las obras para su construcción se ha hecho ahora y en las próximas semanas, antes de acabar el año, comenzará esa obra.
Otro de los proyectos que pusimos en marcha este verano fue la reurbanización de las calles Colón, Industria y Doctor Barberá que ya se está ejecutando y que el mes que viene finalizará. Y también estamos redactando el proyecto para la construcción de un nuevo aparcamiento y un nuevo bosque en el entorno del colegio Bonavista.
También completamos en julio el proceso de compraventa del Forn de la Senyoria, que es uno de los edificios con más historia de Alaquàs. Y ahora mismo estamos trabajando ya en el itinerario para su recuperación y puesta en valor.
¿Se ha decidido ya qué uso tendrá el espacio polivalente que se anunció en el Forn de la Senyoria?
La voluntad que tenemos es que ese edificio pueda ser aprovechado al máximo. Es un edificio que tiene 400 metros de planta y el plan general permite que se puedan construir dos alturas. Dado que va a ser una inversión importante, porque es un espacio muy significativo y además está bien ubicado en el centro de la población, queremos que sea lo más versátil possible. La planta inferior tiene elementos que queremos conservar y que se pongan en valor por lo que tendrá una función más vinculada al patrimonio y la historia de Alaquàs como un espacio expositivo.
Y en la segunda planta queremos algo totalmentge diferente y que ese edificio contenga la recuperación del patrimonio y la historia de Alaquàs y también una proyección hacia el futuro como un espacio moderno y abierto a nuevas generaciones. Aunque eso se hará siempre y cuando los técnicos que redacten el proyecto consideren que eso es viable y se pueda hacer.
¿Uno de esos proyectos será mejorar las conexiones en transporte público entre Alaquàs y València?
La mejora de las conexiones autobuses ya estaba licitada antes de acabar la anterior legislatura y la adjudicación era inminente. En esa concesión, se mejoraban las frecuencias, se incluía un autobús nocturno y también se trabajaba en una flota de autobuses más ecológicos. Eso estaba a punto de adjudicarse y yo creo que si no hubiera habido un cambio de gobierno ya se hubiera hecho.
Entiendo que un nuevo gobierno tiene que analizar todos los proyectos que hay, pero espero que esta adjudicación sea una cosa inmediata y en aproximadamente seis meses podamos disfrutar de esas ventajas porque ahora mismo la conexión por autobús es la único medio de transporte público que tiene Alaquàs.
En cuanto al metro, teníamos un compromiso que había adquirido el gobierno del Botànic para agilizar al máximo la redacción del proyecto y que llegara la red de Metrovalencia a Alaquàs; aunque se preveía que las obras pudieran empezar en una década. Un plazo que pienso que es razonable teniendo en cuenta la gran inversión que tenía este proyecto.
Pero con el cambio de gobierno, todavía no sabemos cuál es el posicionamiento de la conselleria de Movilidad y estamos pendientes de concertar una reunión. La demanda de la ciudadanía es que en diez años podamos tener esa conexión por metro. Alaquàs, Aldaia y Xirivella, que estamos al margen de la red de metro y tenemos en conjunto casi 100.000 habitantes. No solo es una cuestión de comparativa, sino que es necesario para mejorar nuestras conexiones en transporte público.
Y, por otro lado, estaría la cuestión de los trenes de Cercanías en la que también se necesita una mejora importante porque se reabrió la línea C3 que conecta con València pasando por La Fe y un trayecto en el que antes se tardaba 12 minutos aproximadamente, ahora se tardan 35 minutos y eso desincentiva que la gente lo use.
Me consta que por parte del gobierno central se están empezando a hacer inversiones pero creo que hay que apostar claramente por la mejora del servicio de Cercanías, que podría ser una alternativa, a corto plazo, hasta que el metro esté funcionando. Nosotros vamos a seguir haciendo la misma presión que hacíamos con el gobierno del Botànic.
¿Cómo ve las relaciones entre Alaquàs y el nuevo gobierno de la Generalitat Valenciana y la Diputación?
Yo creo que cuando hablamos de instituciones tenemos que olvidarnos un poco del color político porque aquí estamos para solucionar los problemas de la ciudadanía. Yo soy el alcalde de todos y tenemos que procurar resolver los problemas de todos y todas. Confío y espero, y si no lo diremos, que el tratamiento tanto de la Diputació como de la Generalitat, sea neutro respecto a que aquí tengamos un gobierno socialista y allí sea del Partido Popular.
De hecho, en la primera reunión que hemos tenido ya con el director general de la Conselleria de Sanidad, la relación fue fluida, productiva y espero que continúe siendo así. Como aún estamos en los primeros meses, vamos a dar un margen de confianza para que las cosas se hagan para resolver los problemas de la ciudadanía y no los de los ayuntamientos de tu color político.
¿Cuáles van a ser las principales reivindicaciones que hará como miembro de la Mancomunitat de l'Horta Sud?
Seguiremos trabajando en las cuestiones clave como la mejora del transporte, sobre todo en algunas zonas como la de Alaquàs, Catarroja o Sedaví que tienen necesidades importantes que suplir en el transporte público.
Tenemos que seguir en esa misma línea de ofrecer más servicios y potenciar las economías de escala y también en cuestiones de infraestructuras como la problemática que hay en las líneas de Cercanías de algunos municipios. También se va a trabajar para que municipios que no tengan un cuerpo de Protección Civil y quieran tener, como es el caso de Alaquàs, puedan.
¿Ya se han licitado las obras del centro de salud?
Nos dijeron desde Sanidad que a lo largo del mes de octubre se licitaría la obra porque el proyecto ya estaba hecho y aprobado. Todavía no tenemos constancia de que se haya producido, pero vamos a contactar con la Conselleria para ver si los plazos se están cumpliendo y por fin esa ampliación del centro de salud, que llevamos más de una década reclamando, es una realidad. Aunque no sea una competencia municipal, sino autonómica, desde el ayuntamiento tenemos que velar para que se cumplan los plazos.
Este es uno de los proyectos más esperados por la ciudadanía porque tenemos un centro de salud que se inauguró en 1996 cuando éramos 20.000 habitantes y ahora ya hemos superado los 30.000 por lo que son unas instalaciones que ya no dan a basto.
¿En qué van a consistir esos trabajos en el centro sanitario?
Se va a construir un edificio anexo justo enfrente del que hay ahora con tres alturas y serán 1000 metros cuadrados más de nuevas instalaciones. Habrá trece nuevas consultas y una nueva sala de espera para las extracciones y también se reformará el centro de salud actual. En este, se va a hacer una actuación importante para mejorar sus instalaciones y ponerlas al día. En total, se van a invertir más de 4 millones de euros.
Tras las elecciones municipales, muchas localidades con gobiernos socialistas pasaron a ser gobernadas por el PP. Es el caso de Xirivella, Torrent o también Alcàsser. ¿A qué cree que se debe ese cambio? ¿Se ha analizado desde el PSPV en l’Horta Sud?
Yo creo que un alcalde conoce muy bien la realidad de su pueblo, pero es mucho más difícil conocer las dinámicas y las cuestiones particulares de otras localidades como puede ser en Alcàsser que sé que han tenido un problema bastante serio con la depuradora. Entonces no me atrevo a hablar de por qué en esos pueblos se ha producido un cambio.
Lo que sí que es evidente es que en las elecciones municipales y autonómicas de mayo ha habido un impacto muy importante de cuál era la situación política a nivel nacional. Aunque es cierto que la gente en su pueblo tiene muy en cuenta la persona que se presenta, no todo el mundo lo hace y hubo un porcentaje que se deja guiar por la situación nacional.
En Xirivella y Torrent, por ejemplo, el Partido Socialista continuó siendo el partido más votado y solamente un pacto entre el PP y la ultraderecha de Vox ha hecho que hubiera un cambio de gobierno. Si al final hubiéramos defendido la máxima de que gobierne el partido más votado, seguiría gobernando la izquierda y ha pasado lo mismo a nivel autonómico. En Alaquàs, Xirivella, Torrent o la Comunitat Valenciana, el Partido Socialista ha tenido más votos, pero ha sido nuestro socio Compromís quien se ha hundido perdiendo 150.000 votos a nivel autonómico.
Si Compromís se hubiera mantenido, tanto en Torrent como en Xirivella, esos pactos de gobierno progresista se hubieran reeditado. Por lo tanto, ha sido por la mínima y sobre todo porque ha influido la cuestión nacional en las elecciones municipales. El problema es que magníficos alcaldes, alcaldesas y un gobierno de la Generalitat que había hecho un gran trabajo han sufrido esa situación a nivel nacional.
En cambio, en Alaquàs el PSPV lleva gobernando 11 legislaturas. ¿A qué cree que se debe la alta confianza de la ciudadanía en el proyecto socialista?
Uno de los motivos es que Alaquàs tiene una base mayoritaria de la población que es de izquierdas como muchos de los pueblos del cinturón de l’Horta. De hecho, muchas veces se le denomina como ‘cinturón rojo’ porque, mayoritariamente, ha gobernado la izquierda y sociológicamente, puede ser que por la población que llegó que era en gran parte trabajadora, este es un pueblo de izquierdas.
Además, creo que los gobiernos que ha habido a lo largo de las once legislaturas socialistas han sabido escuchar a la ciudadanía y dar respuesta a sus demandas, dentro de nuestras posibilidades y limitaciones presupuestarias, y eso creo que la gente lo acaba valorando.
También incluiría un tercer factor, ya que aunque el PSPV lleva gobernando once legislaturas ha habido mucha renovación de cargos dentro del gobierno, ya que yo soy el quinto alcalde socialista que tiene Alaquàs. Hemos sabido renovar los liderazgos y los equipos. No pasa nada por que un alcalde esté muchos años gobernando, pero la gente también valora que, después de un tiempo prudencial, los equipos se renueven y se incorpore gente nueva que, aunque mantenga los mismos valores, principios y la misma línea de trabajo, tenga nuevas ideas y perspectivas.
Muchos ayuntamientos de la comarca sitúan la limpieza viaria como la principal reivindicación ciudadana. ¿En el caso de Alaquàs, qué es aquello que le piden los vecinos y vecinas?
La limpieza es siempre el problema que la ciudadanía nos plantea. Nosotros planteamos nuevos servicios e infraestructuras como una nueva biblioteca o una cafetería en el parque de la Sequieta, pero, al final, la gente aunque quiere cosas nuevas, lo que más pide es que donde viva esté limpio y en buen estado. En todos los municipios lo demandan y aquí también, aunque nunca acabarías de invertir en esa cuestión porque la gente siempre quiere más.
Evidentemente, no estamos satisfechos y queremos incrementar el servicio de limpieza para que el pueblo sea más bonito. Además, uno de nuestros ejes de trabajo es ser un pueblo más sostenible que significa ser más verde, más accesible, con más jardines y creo que hemos hecho un trabajo increíble estos últimos cuatro años para conseguirlo. Pero eso también implica más mantenimiento y destinar más recursos económicos y también necesitamos la colaboración ciudadana para mantener la limpieza en el pueblo.
Junto con la limpieza, otra de las reivindicaciones es el tema del aparcamiento. Si queremos una ciudad accesible eso implica aceras más amplias, más parques, más jardines y la prioridad son las personas, no los vehículos. Lo que ocurre es que en Alaquàs cada vez hay más vehículos, y no menos, debido a la complicada situación de transporte público que tenemos y en algún lugar tienen que aparcar. Al final, también tienes que dar solución a eso porque es una demanda importante de la ciudadanía; por lo que vamos a construir un aparcamiento de 120 plazas en las zonas que se puede construir, porque no es una cuestión presupuestaria, sino de espacio.
¿Cómo le gustaría que fuera el Alaquàs del futuro?
Aquí llevamos 40 años de gobiernos socialistas y al final la preocupación siempre ha sido la misma: queríamos una ciudad para las personas. En Alaquàs hay dos partes muy diferenciadas, la residencial y la industrial, y la residencial está rodeada de muchos espacios verdes muy grandes y seguimos inaugurando parques para aumentar los pulmones verdes en la población. El objetivo que tenemos es que Alaquàs sea una ciudad verde, sostenible, para las personas y accesible.
Además, otra vertiente que destacaría es que nos preocupa mucho la cultura y la recuperación del patrimonio: tenemos el Castillo de Alaquàs del siglo XVI y su recuperación marcó un punto de inflexión para la localidad, ya que la vida cultural, social y educativa de Alaquàs no sería la misma sin este edificio. También hemos iniciado un proyecto para recuperar los nombres antiguos de las calles, tal y como se denominaban en el siglo XIV, XV y XVI.