El Pleno del Consell ha aprobado el proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Ecológica de la Comunitat Valenciana que "traza una hoja de ruta para reducir las emisiones y fijar los instrumentos necesarios para asegurar una transición justa" y marca unos objetivos de reducción de emisiones del 40% en 2030 y alcanzar la neutralidad en 2050".
Esta norma, que sigue los objetivos marcados por la Unión Europea, busca "revertir el impacto de los efectos de la emergencia climática, especialmente virulenta en la Comunitat Valenciana" y así reconvertir la economía actual en un sistema bajo en carbono, competitivo, innovador y eficiente en el uso de recursos.
En materia de consumo energético, la ambición es de, al menos, reducirlo en un 35,4 % en 2030, mientras que se espera que también en 2030 el 42 % de la energía que consumimos provenga de las energías renovables y se conseguirá a través del Plan director de Energías Renovables de la Conselleria.
El nuevo proyecto legislativo define cuatro ejes prioritarios de acción para adaptar la estrategia de adaptación y mitigación del cambio climático: Energía, Urbanismo y Territorio, Movilidad y Fiscalidad Verde.
Energía
En referencia a las actuaciones de Territorio, el proyecto de ley alude a agilizar los trámites burocráticos necesarios para instalar mecanismos de porducción de energía renovable. Además, otra de las líneas de trabajo se centrará en reducir a menos de un año el tiempo de concesión de los permisos para colocar este tipo de instalaciones.
Para cumplir con los propósitos vinculantes, la Conselleria se dota de un Plan Valenciano Integrado de Energía y Cambio Climático, ya en licitación, un instrumento, integrado y transversal, de ordenación y planificación de los objetivos sectoriales y de las acciones específicas que se desarrollarán para dar respuesta a las finalidades de esta ley.
Dentro de las principales medidas en Movilidad, destaca la red pública de puntos de recarga junto con fórmulas de transporte sostenible y peatonalización, mientras que la fiscalidad verde articula un fondo con carácter finalista para asumir las inversiones en Transición Ecológica, además de contar con una partida de los presupuestos autonómicos y de la financiación que reconozca tanto el Gobierno estatal como el Pacto Verde Europeo.
En el ámbito educativo, la educación ambiental se incluirá dentro del currículo escolar para potenciar la formación ciudadana en este aspecto.