La portavoz adjunta de Compromís en las Corts, Paula Espinosa, ha anunciado la presentación de una batería de iniciativas parlamentarias para inquirir al Consell sobre las graves problemáticas derivadas del nuevo decreto de caza y resoluciones de la Conselleria de Medio Ambiente Infraestructuras y Territorio.
Una representación de Compromís, compuesta por Paula Espinosa y el también diputado en las Corts Juan Bordera, han mantenido reuniones con varias asociaciones animalistas y afectadas, las cuales han expresado su preocupación ante una normativa que consideran un despropósito y que presenta numerosas deficiencias tanto en su fundamento científico como en su aplicación. También se han mostrado en contra de la nueva normativa la Asociación Profesional de Agentes Medioambientales por menoscabar sus competencias.
Según ha explicado Espinosa, la Conselleria de Medio Ambiente justifica la necesidad de una caza intensiva por una supuesta sobrepoblación de ungulados, pero no ha presentado censos fiables ni estudios científicos que sustenten esta afirmación. "Hemos registrado una batería de preguntas y una solicitud de documentación para que el gobierno del PP explique de dónde saca la información en la que sustenta el decreto. Hasta que estos informes no sean presentados, podemos decir que la normativa se basa en percepciones y estimaciones difícilmente contrastables sobre el impacto de los ungulados en cultivos, tráfico o transmisión de enfermedades", ha destacado.
Además de la carencia de justificación científica, la nueva normativa supone un riesgo para la biodiversidad y la seguridad ciudadana. Entre las medidas más preocupantes, Compromís denuncia que se permite la caza durante todo el año para varias especies, incluyendo hembras en época de cría, lo cual puede afectar gravemente la regeneración natural de las poblaciones y no respeta los ciclos de reproducción.
No se diferencian las especies según sus tasas de reproducción, equiparando herbívoros de baja natalidad (como el corzo o el ciervo) con especies de crecimiento poblacional más alto como el jabalí. Así mismo se eliminan restricciones temporales que anteriormente protegían las especies en periodos críticos como la gestación y la crianza.
Con este decreto se permite el uso de rondas nocturnas, atrayentes alimentarios, miras de visión térmica e infrarroja y armas con iluminación artificial, facilitando la caza y abriendo la puerta a abusos y caza furtiva. Se permite la caza en parques urbanos, playas y caminos públicos, aumentando el riesgo para senderistas, ciclistas y otros usuarios de estos espacios. Se incluyen vareos y esperas nocturnas sin descanso, provocando un estrés continuo en los animales. Y se desconsidera el papel ecológico de los ungulados en la prevención de incendios forestales mediante el control de la vegetación.
Además, Compromís defiende la necesidad de establecer controles de alcoholemia después de las jornadas de caza, una medida que ayudaría a prevenir accidentes y garantizar la seguridad de todas las personas implicadas. Así mismo, critican que el decreto no prevé un aumento de agentes medioambientales ni del SEPRONA para supervisar las cacerías y evitar posibles infracciones o abusos.
"El gobierno del PP ha optado por una regulación descontrolada, sin criterio ni garantías científicas, que pone en peligro tanto la biodiversidad como la seguridad de la ciudadanía. Por eso, exigimos que el Consell rectifique y presente los estudios necesarios que justifiquen estas medidas, y que se escuche a los expertos y a las organizaciones afectadas", ha concluido Espinosa.