Carlos Mazón aboga por una "necesaria" combinación de energía tradicional y renovable

El president del Consell reiteró durante la pasada semana su rechazo al plan del gobierno central de cerrar la central nuclear de Cofrentes

Guardar

Vista aérea de la Central Nuclear de Cofrentes. Imagen: Consejo de Seguridad Nuclear (CSN)
Vista aérea de la Central Nuclear de Cofrentes. Imagen: Consejo de Seguridad Nuclear (CSN)

El president de la Generalitat, Carlos Mazón, se opone al cierre de la central nuclear de Cofrentes a la vez que defiende el uso de las energías renovables en la Comunitat Valenciana. Mazón considera la combinación de los dos tipos de energía como “necesaria” para alcanzar la soberanía energética del territorio.

Durante la pasada semana, el President insistió en varias ocasiones en que el Consell necesita una prórroga en Cofrentes, afirmando que es “una irresponsabilidad” desprenderse de golpe del 45% de la energía producida en la Comunitat Valenciana.

La decisión del gobierno central de cerrar las centrales nucleares españolas ha suscitado las quejas del Consell, quiénes consideran que no existe un criterio común por parte del PSOE a la hora de referirse a la energía nuclear. Mazón afirma que tanto Compromís, como Sumar, como el PSOE “no saben” si están en contra o a favor de este tipo de energía. Según el president, esta falta de criterio único sobre “el asunto más estratégico respecto a la competitividad de la Comunitat Valenciana de las últimas décadas” es la razón de la pobreza energética “heredada del Govern del Botànic”. Mazón insiste en que esta falta de criterio único es “intolerable”.

Desde el Consell defienden que la nuclear, “tal y como afirma la Unión Europea”, es una energía “limpia, barata y que aporta capacidad y competitividad”.  Mazón utiliza el ejemplo de países como Suecia, quien va a “potenciar su capacidad nuclear”; Reino Unido, donde se pretende “cuadruplicar” esta fuente de energía o Alemania, país que asegura que “se arrepiente” de abandonar la energía nuclear y que “ya está reculando” en este sentido.

Ante esta situación que se está dando en Europa, Mazón lamenta que en España, desde el gobierno central, se estén dando pasos en la dirección contraria, algo que el president tacha de “falta de sentido común”. El president del Consell advierte de que no es viable depender únicamente de Rusia y de Argelia en tema energéticos mientras aboga por una soberanía real en estos términos: compatibilizando las formas de energía tradicionales con las renovables.

Por otro lado, el president Mazón advierte que no va a entrar a analizar las “condiciones que el gobierno central impuso” a Iberdrola para que cerrara la planta de cofrentes para 2030. Además, añade que “le consta” que tanto esta empresa, como la comarca,  están interesadas en prorrogar la vida útil de la central de la localidad. 

Mazón reclama a toda la Comunitat Valenciana que, desde el respeto al medio ambiente, se pronuncie contra este tipo de medidas para “no perder competitividad” y para que los servicios de luz y agua no se encarezcan en exceso. En este sentido, el president piensa que ”se ha avanzado demasiado en contra del sentido común”.

Por su parte, la consellera de Innovación, Industria, Comercio y Turismo, Nuria Montes, también se pronunció la semana pasada al respecto de esta cuestión. Durante su intervención en el Fórum Europa Tribuna Mediterráneo, reclamó a “toda la sociedad valenciana” que llevara a cabo una reflexión sobre el futuro de la planta de Cofrentes, entendiendo “la necesidad de prolongar su vida útil”. Para Montes, se trata de una cuestión cuyo impacto e importancia se puede equiparar a la ampliación del puerto de València o la necesidad de traer agua.

Montes añade que “la central nuclear de Cofrentes tiene una planta gemela en los Estados Unidos que está en perfecto estado y cuya vida útil se ha ampliado otros 20 años”. Según la consellera, si la Comunitat Valenciana se queda sin la producción de Cofrentes, esta no tiene “fuentes energéticas alternativas suficientes para cubrir ese vacío”.

Cierre de las centrales nucleares de toda España

El 27 de diciembre del pasado año, el gobierno central aprobó el 7ª Plan General de Residuos Radiactivos que, entre otras medidas, establece el cierre de las centrales nucleares españolas entre el año 2027 y el 2035.

El principal objetivo de esta serie de medidas es gestionar el almacenamiento de los residuos radiactivos que se generan en el país. Actualmente, por lo general, estos residuos se almacenan en cada central. 

En un principio, con la anterior normativa, se pretendía almacenar todo este material en un almacén temporal centralizado (ATC) en Villar de Cañas, en Castilla-La Mancha. Con el nuevo plan se establece que estos residuos se repartan entre siete almacenes individuales (ATI), es decir, uno por cada central. Esta modificación conlleva un mayor coste económica a la hora de gestionar estos materiales.

Todas estas decisiones se acordaron en marzo de 2019 de forma conjunta entre el gobierno central y las empresas que gestionan cada una de estas plantas. No obstante, según el Foro de la Industria Nuclear Española, la situación energética en el mundo ha cambiado drásticamente y muchas de estas empresas eléctricas han trasladado a la administración su deseo de prolongar la vida útil de las centrales nucleares.

En el ámbito internacional, organismos como la Agencia Internacional de la Energía abogan por el uso de la energía nuclear argumentando que el empleo de fuentes renovables no es suficiente para acabar con el calentamiento global, y que estas formas de energía han de ser complementadas con fuentes que garanticen el suministro de manera continua.

Destacados