El terremoto político vivido en el escenario político español empezó con el "vacunagate" en Murcia y una fracasada moción de censura PP-Cs en la misma región desencadenó un efecto dominó con la disolución de la Asamblea de Madrid, con una convocatoria electoral para el próximo 4 de mayo, con la salida del vicepresidente Iglesias del Gobierno de España y su elección como candidato de Unidas Podemos contra Ayuso y a última hora con la dimisión de Toni Cantó como diputado y coordinador autonómico de la formación naranja en la Comunitat Valenciana.
En sus primeras declaraciones, Toni Cantó explica que ha perdido "la ilusión en la política", y que "las únicas ofertas que he recibido son de dos productoras de televisión", por las que, afirma que se decanta y lo veremos en este formato audiovisual. Del mismo modo, Cantó, deja las dudas aparte sobre su paradero político y confirma que "descarta volver a entrar en política" y justifica su dimisión de esta formación porque "no me siento representado por la cúpula de Ciudadanos".
"Creo que la cúpula de Ciudadanos hablaba ayer sobre gente que se iba -refiriéndose a los tránsfugas murcianos que han aceptado la oferta del PP- y los que verdaderamente se están alejando de la esencia del partido son la propia Inés Arrimadas y su equipo", explicaba Cantó.
Del mismo modo, el ya exdiputado de Ciudadanos en la Comunitat Valenciana, Toni Cantó ha afirmado que ya ha firmado su dimisión como diputado y la registrará "cuando me reúna con el grupo parlamentario". Cantó, ante su posible fichaje en el Partido Popular, ha admitido que "lo descarto" y que "no voy a aceptar de los que se apoltronan en su sueldo elecciones de nada" a lo que proseguía que "soy un hombre libre y haré lo que me dé la gana".
Cantó aprovechando la presencia de los medios, ha querido dar las gracias a los responsables de prensa y a los cargos electos de otros partidos en el hemiciclo valenciano "que echará mucho de menos" y afirma que "recordará con gran honor durante toda su vida por haberse sentido tan privilegiado".
No obstante, Cantó ha admitido que cree que "sí que seguirá militando en Ciudadanos" puesto que cree que la militancia tiene un papel muy importante para cambiar el rumbo de la formación y en manos de la ejecutiva de Arrimadas, en la que "ya no confío".
Por último, el ya exsíndic y coordinador autonómico de la formación naranja admite que ayer "esperaba cambios en la ejecutiva" y al no producirse "admití mi dimisión". Así, Cantó, sincero con la prensa y algo emocionado ha admitido que antes de la ejecutiva de ayer "me sentaron en un despachito para limpiar y lavar la imagen como si fuera un jarrón chino" a lo que explica que "no estoy para eso". "No estoy para negociar en un despachito ni para tener un sueldito", admite Cantó.