El Consejo de Ministros aprobó el pasado viernes la ley de protección animal que regula la relación con los animales de compañía para dar respuesta al creciente rechazo de la sociedad contra el maltrato, el abandono y el sacrificio animal. Al ser preguntada por esta cuestión, la vicepresidenta de la Generalitat, Mónica Oltra, recordó que la Generalitat “le lleva la delantera” al Gobierno español por lo que a esta ley respecta.
El Consell aprobó en el mes de agosto un anteproyecto de ley de Protección, Bienestar y Tenencia Responsable de los Animales de Compañía. En estos momentos, según fuentes de Conselleria, esta iniciativa se encuentra en estado de tramitación, ya que aún debe ser aprobada en Les Corts por los grupos parlamentarios. No obstante, esto no sucederá hasta dentro de un tiempo, detallan las mismas fuentes.
El texto que fue aprobado por la administración autonómica es pionero a nivel estatal y reconoce a los animales seres sensibles, establece el sacrificio cero y regula la tenencia responsable que hace referencia a las condiciones de vida digna del animal. Esto implica atención, supervisión, cuidados y condiciones higiénico-sanitarias: espacios adecuados, además de alimentación y bebida suficiente y conveniente para su desarrollo.
El nuevo marco legislativo prevé la creación de un registro de personas y entidades inhabilitadas judicialmente por maltrato a los animales para evitar que personas o asociaciones penadas por mala praxis puedan volver a gestionar núcleos zoológicos. También se prohibirá el uso de los animales como regalo, premio o reclamo publicitario y la educación agresiva, la atadura permanente y los espectáculos circenses con animales salvajes.
El anteproyecto se articula en torno al refuerzo de la acción de las administraciones en la tutela de los derechos de los animales de compañía, las obligaciones de las personas responsables para garantizar el cumplimiento de esos derechos y en la concienciación social a través de la formación y educación en favor de una conducta cívica y compasiva. Otra novedad importante es el reconocimiento de las casas de acogida.
Por otro lado, el régimen sancionador endurece las multas que pueden ascender hasta los 45.000 euros y que tendrán un carácter finalista: deben destinarse a actuaciones de protección de los animales. Además, brinda amparo legal a prácticas dentro del ámbito municipal como la creación de fórmulas públicas de adopción o la regulación del número de animales de compañía por vivienda con la suficiente flexibilidad y proporcionalidad.
La ley a nivel nacional
El Consejo de ministros aprobó este viernes el proyecto de ley de derechos y bienestar de los animales, que apuesta por reducir a cero el maltrato y el sacrificio animal, junto a otro proyecto para modificar el Código Penal con el fin de elevar las penas por maltrato, que irán de tres a 18 meses de multa hasta 24 meses de cárcel. Los textos serán remitidos al Congreso de los Diputados para iniciar su tramitación parlamentaria.
Por otro lado, junto con el proyecto de ley se ha aprobado un anteproyecto de ley para reformar el Código Penal para poner fin a la "impunidad" que ha gozado el maltrato en España hasta ahora, donde "no hay reproche a quemar a un zorro vivo". Así, la reforma del Código penal establecerá penas de cárcel de 18 meses, la inhabilitación hasta cinco años para vivir o trabajar con animales y, si el resultado de ese maltrato es la muerte del animal, la pena de cárcel ascenderá hasta 24 meses.
De acuerdo con el texto del anteproyecto, el abandono de un animal resultará penado con una multa de 1 a 6 meses o trabajos en beneficio de la comunidad de hasta 90 días y la pena de inhabilitación de uno a tres años para ejercer cualquier profesión relacionada con animales o su tenencia.
Otro de los objetivos del proyecto de ley es luchar contra el abandono animal, ya que, según la ministra de Derechos Sociales Ione Belarra, cada año en España se abandonan 300.000 animales, 800 al día. "Son cifras que nuestro país no se puede permitir", valora la ministra, que confía en que una vez que el texto establece que la cría de animales solo podrá ser ejercida por profesionales, la vacunación obligatoria y la creación de varios registros estatales van a ayudar al abandono cero.
Además, el texto señala que en España uno de cada tres hogares posee un animal de compañía y 13 millones de animales están registrados e identificados, pero se estima que la mitad de los animales de compañía existentes se encuentran fuera del control oficial, al no estar identificados de manera legal, con el riesgo que ello supone, no solo para su adecuada protección sino también para la propia seguridad y salud pública.