La Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) advierte que las mujeres cobran de media unos 4948 euros menos que los hombres lo que se traduce en que las mujeres deberían trabajar 53 días más al año para conseguir la misma remuneración que los hombres. La causa de esta desigualdad entre hombres y mujeres tiene nombre: la brecha salarial de género.
En concreto, en la Comunidad Valenciana, los últimos datos publicados por la Conselleria de Economía dirigida por Rafael Climent reflejan que la desigualdad salarial entre hombres y mujeres disminuyó 0,6 puntos entre 2019 y 2020 y asciende actualmente en el 19,9%, es decir un hombre cobra casi un 20% más que una mujer.
Así, mientras que en el sector privado este número se sitúa en el 16,2%, en la administración pública es de un 10,3%, aseguran desde la Asociación de Empresarias, Profesionales y Directivas de Valencia (EVAP). Estas cifras hicieron que hace un año Mònica Oltra, la vicepresidenta de la Generalitat que también encabeza la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas anunciara la puesta en marcha del proceso de creación de una nueva ley de igualdad.
Primeras revelaciones sobre la futura Ley de Igualdad
Esta nueva norma, que sustituirá a la aprobada hace casi 20 años, en 2003, se basará entorno a cuatro ejes: “la redistribución e igualdad de oportunidades; el reconocimiento de los derechos; la democracia, paridad y representatividad; y la creación de políticas vinculadas a las masculinidades igualitarias para impulsar la incorporación de los hombres a las profesiones tradicionalmente feminizadas.
Así lo ha anunciado la consellera Mònica Oltra en un acto a las puertas del Ayuntamiento de València organizado por la Asociación de Empresarias, Profesionales y Directivas de Valencia (EVAP) coincidiendo con el día internacional por la igualdad salarial que se celebra hoy 22 de febrero.
Uno de los ejes vertebradores de esta nueva ley tendrá por objetivo cuestiones pendientes como la erradicación de la brecha salarial y se concederán incentivos a las empresas con más del 40% de sus puestos directivos ocupados por mujeres para aumentar el número de mujeres en los consejos de administración y altos cargos.
Asimismo, también se plantea regular que para acceder a subvenciones o contratación pública, las empresas deban “hacer públicas sus tablas salariales” y en el caso de que se detecte un “desvío injustificado de más del 5% entre el salario que perciben las mujeres y los hombres, tendrán que impulsar planes para revertir esa brecha salarial", ha precisado Oltra.
Causas de la brecha salarial de género
Con motivo del día internacional por la igualdad salarial, la EVAP ha lanzado una campaña para concienciar e iniciar el camino hacia la erradicación de esta desigualdad de género. De este modo, la campaña en vídeo muestra que la principal causa de la brecha salarial entre hombres y mujeres reside en los complementos y las horas extra, ya que, a diferencia que los hombres, las mujeres trabajan menos horas extra que sus compañeros hombres porque asumen tareas de cuidados no remunerados a niños y niñas y personas dependientes.
Además, esta brecha salarial se acentúa según el sector laboral. Así, en ámbitos como los altos cargos directivos de una empresa donde el personal obtiene mayores salarios, solo el 6,3% de los contratos llevan nombre de mujer. Y, por el contrario, sectores con sueldos más bajos, como el servicios, el del comercio, el sanitario o la limpieza, registran una alta tasa de mujeres.
Por esta razón, una de las claves que logró reducir esta brecha salarial, a nivel estatal, en 2019, respecto a 2018, fue el incremento del salario mínimo interprofesional (SMI), tal y como afirman la vicesecretaria general de UGT, Cristina Antoñanzas. Esta subida “benefició mayoritariamente a las mujeres” porque son más de dos millones las que cobran el SMI y como consecuencia vieron elevado su sueldo en 2019.
En ese sentido, se espera que la subida del SMI hasta los 1000 euros mensuales que fue anunciada por el gobierno central el pasado mes de enero siga la misma tónica y consiga reducir también la brecha salarial.