El regidor de Desarrollo Urbano y Vivienda, Vicent Sarrià, ha presentado hoy la primera versión del Plan Especial del Cabanyal-Canyamelar y su entorno (PEC). Un proyecto centrado en la creación de un parque público de 1.000 viviendas para atraer a antiguo y nuevo vecindario con más equipamientos y la conversión de parte de las vías públicas para peatones, entre otras líneas.
Uno de los aspectos que más ha destacado el regidor ha sido la creación de un parque público de viviendas "adoptando medidas que mejoran la calidad de vida del barrio", indica la primera versión del PEC. El Cabanyal, así, contaría con 703 nuevas viviendas que se prevén en el desarrollo de las 5 Unidades de Ejecución, de las cuales 422 serán de Protección Oficial (60%) y 281 de renta libre, es decir, privadas (40%). En estas últimas, Sarrià asegura que habrá límites para las viviendas turísticas, sobre todo en una zona como esta.
A estas se suman 235 Viviendas-Alojamientos Dotacionales en suelo de dominio público destinadas al alquiler de menores de 35 años, mayores de 65 y colectivos sociales vulnerables. En este sentido, Sarrià y la primera Teniente de Alcalde, Sandra Gómez, quien lo ha acompañado en la presentación, han destacado que la proximidad del barrio en la Universitat Politècnica de València (UPV) y el aumento del precio de los alquileres han sido importantes a la hora de pensar en los estudiantes como posibles arrendatarios de este último tipo de viviendas. Se prevé que los precios sean asequibles, han asegurado.
En total, 12.305 viviendas conformarán el barrio marítimo, una cifra que representa uno de los objetivos principales del PEC: atraer el vecindario que abandonó su hogar, invitar a nuevos vecinos y rejuvenecer la población. Además, el regidor ha insistido en que se hará "sin necesidad de recurrir a la expropiación y a través de fórmulas de gestión urbanística cómo son las cinco unidades de ejecución".
La remodelación también llegará a las calles, ya qué otra de las líneas es "recuperar la calle y el espacio público". El PEC contempla la reconversión de un 10% de la superficie total de la red viaria en "viaria de coexistencia" con uso prioritario del peatón. Una medida con que se conformará una malla urbana de itinerarios de "movilitat reducida" que abarcarà casi 54.000 metros cuadrados.
Esta medida una reducción de alrededor de 1.000 plazas de aparcamiento que se suplirán con la construcción de seis aparcamientos públicos con 1.249 plazas. En concreto, habrá cinco en edificación de altura (con capacidad para 1.011 vehículos) y uno subterráneo (a la calle Pavía, de 238 plazas) que se destinarán a los vecinos que se quedan sin lugar de aparcamiento en la vivienda. Tanto los responsables del PEC como el regidor, han incidido en que se ofrecerán a "precios asequibles".
Por otro lado, el PEC plantea medidas que mejoran la accesibilidad de la ciudad a la playa para los vecinos y vecinas y para el resto de valencianos. Por eso, habrá una mejora en la transición de Blasco Ibáñez y el Cabanyal-Canyamelar que en principio será una plaza con la actual estación que ayudo a desviar el tráfico. De momento, tampoco hay una propuesta concreta para el bloque portuario, aunque Sarriá asegura que se está trabajando.
Por último, el regidor ha destacado que el proyecto, "de los más importantes de la legislatura" es "pionero porque tendrá una memoria económica que refleje cómo se realizarán algunas dotaciones". Además, ha incidido en que se han tenido en cuenta las reivindicaciones de las diversas asociaciones y colectivos de este barrio.