El paro en la Comunidad Valenciana ha bajado considerablemente. De hecho, en estos cuatro años del Govern del Botànic se ha conseguido reducir en un 10% la tasa de desempleo que azotaba a nuestra autonomía, situándola, como aseguraba la vicepresidenta de la Generalitat, Mónica Oltra, “por debajo de la media nacional”. Aun así, todavía hay más de 300.000 personas que sufren las consecuencias del paro. Por este motivo, desde el Consell se ha planteado un nuevo modelo para seguir rebajando el desempleo.
De esta manera, tal y como ha explicado el Presidente de la Generalitat y candidato por el PSPV, Ximo Puig, se ha preparado un Plan de Empleo digno que lucha contra los contratos basura y contra la economía sumergida, con el objetivo de mejorar las condiciones laborales actuales, pero también para fomentar un empleo de calidad entre aquellos sectores más desprotegidos y revitalizando sectores abandonados, como la agricultura o las camareras de piso.
En este sentido, Puig ha recordado que es importante echar la vista atrás para saber “cómo estábamos antes y cómo estamos ahora. La Comunidad Valenciana ya no es el paradigma de la corrupción. Hemos logrado un entorno estable, gracias a un gobierno que, lo hemos podido hacer mejor o peor, pero que ha sido honrado. Y eso también ha sido el motor que ha impulsado el aumento de la inversión extranjera que ha generado riqueza y creación de empleo”. En total, alrededor de 240.000 puestos de trabajo.
Pero, además, Puig ha anunciado la reserva de una partida de 48 millones de euros, que se destinarán a incentivar la contratación de aquellos colectivos más vulnerables, es decir, “las mujeres, los jóvenes y los parados de larga duración”. Un plan para generar empleo, pero que no se aleja de la parte más social, necesaria para seguir avanzando en el Estado del Bienestar.
Finalmente, el Presidente de la Generalitat ha criticado la revolución fiscal de Bonig, o como la ha definido, “la contrareforma fiscal de Bonig” porque para Ximo Puig “sería volver a donde ya estábamos. Nos está vendiendo humo porque esa reforma no genera riqueza”, sino que como bien apuntaba la candidata al Consell de Compromís, Mónica Oltra, “esa reforma solo beneficia a los que más tienen como ya ha ocurrido en Andalucía, que bajan los impuestos a los señoritos, pero les suben el precio de las escuelas a las familias más humildes”.