Valencia se ha consolidado como un importante reclamo turístico, y su gastronomía también ha ayudado a potenciar la marca de nuestra ciudad. Todo esto, junto con el trabajo realizado por el Patronato de Turismo, ha conseguido que la Comunidad Valenciana sea uno de los destinos elegidos para disfrutar de unas vacaciones de calidad. Y para hablar de turismo qué mejor manera que hacerlo de la mano de Pilar Moncho, Vicepresidenta del Patronato de Turismo y Diputada de Turismo.
¿Es la gastronomía un pilar fundamental en la promoción de la Comunidad Valenciana como destino turístico?
Nosotros trabajamos la promoción del territorio valenciano como destino turístico excelente combinando todos los ingredientes que nos hacen únicos, es decir, la gastronomía, por supuesto, es un argumento contundente pero no el único. Por eso estamos poniéndonos ante el sector turístico con la acción estratégica DEL TROS AL PLAT, que ofrece nuestros pueblos como lugares únicos en los cuales los visitantes, y los mismos ciudadanos y ciudadanas, experimentan el living valenciano en primera persona. No se trata sólo de probar platos o productos autóctonos, sino de hacerlo en un espacio emblemático, servido de una manera mucho más nuestra, con nuestra luz y nuestro sol, las sierras y montañas, nuestro patrimonio milenario, incluso las plazas de nuestros pueblos como aliados de primera.
Hablamos de esta iniciativa 'Del Tros al Plat'. ¿Cuál es el espíritu de esta acción?
El nombre utilizado en este ambicioso programa hace referencia a la necesaria vinculación entre el territorio donde se cultiva el producto alimentario (el tros) y el nudo de conocimiento que se pone en manos de las capacidades de los cocineros (el plat). Cómo decíamos antes, la cocina es uno de los principales reclamos de nuestros visitantes, y nuestra responsabilidad es cuidarla desde el inicio, valorando a los productores y generando cadenas de valor que puedan generar riqueza en nuestra sociedad.
Para llevar adelante este programa hemos vinculado al Patronato de Turismo de Valencia con el máximo número de agentes interesados: Conselleria de Agricultura, Agencia Valenciana del Turismo, Fundación Turismo Valencia, sindicatos agrarios, cooperativas agrarias valencianas y cofradías de pescadores, Mercavalencia y Concejalías de Comercio y Agricultura de más de 20 ciudades, mercados municipales y asociaciones como Menjar i viure y la Asociación de cocineros y cocineras de Valencia, así como empresas de distribución y servicios o de productos artesanos.
Con este esfuerzo colaborativo, conseguimos además valorar ante el mundo –ferias internacionales y estatales- las capacidades de nuestros productos y su potencial culinario, mostrando un relato turístico único.
¿Por qué es tan importante potenciar los productos de proximidad y, por consiguiente, la huerta valenciana?
Valencia es una tierra que ha proveído de alimentos de primer orden a lo largo de toda su historia, gracias en gran parte a la misma orografía de nuestra tierra y al clima templado que permite monocultivos en grandes extensiones, como arroz, uva, naranja, etc. Esa capacidad productora también nos ha permitido históricamente una actividad comercializadora que nos ha conectado con el resto del mundo y han convertido la despensa valenciana en un lugar que permite cocinar platos de una riqueza altísima sin salir del territorio.
Para nosotros es muy importante trasladar a todos los ciudadanos y ciudadanas la garantía y calidad que ofrecen los productos cultivados en nuestras huertas, y también aquellos que provienen de nuestro mar. Son productos excelentes al alcance de todo el mundo.
¿Qué opinión tienes sobre la tasa turística? ¿Es esta medida una buena opción?
La mejor opción, sin duda, es conseguir que nuestras ciudades y nuestros pueblos sean lugares idóneos para sus vecinos y vecinas, porque será el mejor síntoma que estamos haciendo bien las cosas y la mejor condición para hacer atractivo nuestro territorio a los visitantes.
Es muy patente que mantener una ciudad limpia y en condiciones excelentes recae siempre en los ciudadanos y creo que es hora de ampliar la responsabilidad a todas las personas que disfrutan de ella. Por eso, veo con buenos ojos la implantación de una tasa que sea municipalista y finalista, es decir, que sus beneficios sean invertidos en nuestras comarcas.
Creo que es el momento de hablar sobre cómo deberíamos de implantarla y recaudarla, dialogando con todos los agentes y haciendo ver que es una medida que, de seguro, beneficiará a todos. De hecho, en aquellos lugares del Estado español donde está implantada, con ejemplos claros como Barcelona o Mallorca, sólo reporta ganancias y beneficios y estoy convencida de que los turistas no dejan de visitar un lugar por el abono de una cantidad mínima, porque hablamos de máximos de un euro o dos, por su alojamiento.
Es necesario poner en marcha el camino para poder consolidarnos y dar un servicio excelente.
En todo caso, esta es mi opinión. La decisión está en manso de nuestros representantes en Les Corts que, al fin y al cabo, son la voz del pueblo.
Por último, ¿Cómo ha cambiado la marca de Valencia para atraer al turismo?
La marca Valencia Turismo ya es una marca consolidada en el sector turístico. Fue nuestro primer objetivo para erradicar cualquier reminiscencia a etapas anteriores marcadas por la corrupción y las malas prácticas. Valencia tenía que pasar página y mirar hacia adelante. Nuestra presencia en ferias, encuentros, salones, jornadas y otros eventos turísticos está dándonos un feedback muy positivo. Estamos contentos y satisfechos pero todavía queda mucho camino por atravesar. Y esto vamos a hacer, seguir trabajando de lo lindo por nuestro territorio, por nuestros pueblos y por todos los valencianos y valencianas.