Según la Fiscalía de Valencia, en junio, la Albufera registró un "alarmante descenso" del nivel de agua del lago, uno de los humedales más importantes de Europa. El ministerio público atribuyó esta situación a la Junta de Desagüe -que defiende el cumplimiento de los niveles indicados- y alerta de la gravedad del daño al equilibrio y sostenibilidad medioambiental en el parte natural, que se encuentra a tan solo 10 kilómetros de València. Sin embargo, Medio Natural demostró que, finalmente, los niveles de agua de la Albufera estaban dentro de la normativa.
Joan Ribó: 'Es imprescindible que se produzca la aportación de un caudal ecológico del Júcar, porque la Albufera sin el Júcar difícilmente puede vivir'
Sobre esta problemática, Joan Ribó se pronunció ayer, afirmando que el problema de la Albufera necesita "la aportación de un caudal ecológico del Júcar al parque natural que garantice unos niveles mínimos de agua que, a su vez, impidan la salinización del lago". También destacó que "la Albufera necesita aportaciones de agua de la cuenca hidrográfica del Júcar, y hasta ahora no se está avanzando en ese aspecto. Es imprescindible que se produzca la aportación de un caudal ecológico del Júcar, porque la Albufera sin el Júcar difícilmente puede vivir".
Así pues, hace tiempo que el agua de la Albufera está en un proceso de merma que no parece que se detenga nunca. Aun así, durante los últimos años, se ha hecho bastante para revertir la situación y no alcanzar unos niveles de agua que estén por debajo de lo permitido. Hagamos un repaso por algunas de las intervenciones que las instituciones públicas han ejercido sobre el famoso parque natural.
LAS MEDIDAS DE 2018 PARA CONSERVAR LA ALBUFERA
En enero de 2018, la Junta de Desagüe de la Albufera de València adoptó diferentes medidas ante la notificación de la Fiscalía de València, que alertó sobre un primer descenso del nivel del agua en este emblemático parque natural. El objetivo común de todas estas medidas era el de, naturalmente, proteger y conservar uno de los mejores parques naturales de Europa.Algunas de las medidas, que más tarde se llevaron a cabo, fueron las de someter a autorización previa el bombeo del desagüe del lago, informar cada mes sobre el agua bombeada, el nivel del lago y las mediciones de salida por las golas, que el manejo de las compuertas se realice de forma que exista una comunicación entre el lago y el mar durante la mayor parte del año, con el objetivo de facilitar la entrada de especies piscícolas.
Sin embargo, esas medidas puede que hayan sido incumplidas en el mes de junio de 2019 por la Junta de Desagüe, responsable de cualquier desperfecto que ocurriese en el parque natural. Pese a esto, la Junta afirma que los niveles de agua no están por debajo de los mínimos y que, actualmente, la Albufera goza de un buen estado.
LA CONSERVACIÓN DEL TANCAT DE LA PIPA
Durante los últimos tres años, la preservación de la Albufera ha costado una ingente cantidad de dinero. Por una parte, el coste para la conservación del Tancat de la Pipa, enmarcada dentro del parque natural, fue, en 2017, de 47.500 euros. Este dinero fue a parar a las asociaciones sin ánimo de lucro Acción Ecologista Agró y Sociedad Española de Ornitología (SEO / Birdlife).Pero esto no es todo porque, un año más tarde, el Ayuntamiento de València, a través de la Concejalía de Conservación de Áreas Naturales y Devesa-Albufera, firmó un contrato de colaboración con AE-Agró y SEO para la puesta en valor del Tancat de la Pipa como ecosistema de alto valor ecológico y de uso público, un espacio que reproduce las condiciones ambientales de la Albufera antes del colapso ambiental de los años 70.
MÁS DE 60.000 EUROS PARA LIMPIAR LA ALBUFERA
En 2019 se anunció, por otra parte, el gasto que supuso el mantenimiento de la Albufera en 2018. Se invirtieron un total de 61.028 euros en el servicio de limpieza, dragado y conservación de orillas, canales y acequias de la Albufera. Este presupuesto estaba incluido dentro del contrato de tres años que se formalizó el pasado mes de octubre.Con este dinero se realizaron diversas actuaciones, pero de entre ellas destaca una muy importante: el dragado del puerto del Saler. Estos trabajos consiguieron extraer 4.200 m³ de sedimento, con una cota de excavación de entre 1,2 y 1,4 metros de profundidad. Además, esta intervención también incluyó los trabajos de preparación de la zona provisional de acopio, accesos a la carga y transporte del sedimento desde la zona de extracción hasta la zona de acopio. El coste final de todo esto fue de 37.831,24 euros.
Otra actuación que se llevó a acabo en el Saler con el uso de este presupuesto fue el desbroce de una superficie total de 7.369,27 m², lo que tuvo un coste de 3.514,16 euros. Además, también se usó el dinero para los trabajos de apertura en las golas del Pujol y del Perellonet, lo que supuso 5.336,10 euros y un total de 105 horas de trabajo en estas actuaciones.
OTRAS ACTUACIONES EN EL PARQUE NATURAL
En este parque natural también se han hecho actuaciones que han costado menos dinero, entre ellas, la retirada de un total de 36,11 toneladas de material vegetal contaminante y especies invasoras que poblaban la Albufera durante el año anterior. La mayor parte de estas especies exóticas se ubicaban en la zona de la Devesa, y algunas de ellas son la pitera, la yuca, el aloe, el periquito, el senecio, el aranto, la oca, el nopal o la uña de gato, entre otras.En segundo lugar, una última y reciente mejora en el parque natural ha sido la renovación del alumbrado, instalando en todo el parque una iluminación respetuosa con el medio ambiente, ya que solo funciona cuando detecta presencia. De esta manera el Ayuntamiento proporciona seguridad a los peatones que transitan por este enclave al tiempo que se respeta el medio ambiente.
Una actuación que tuvo una repercusión mucho menor pero que ayudó a preservar la Albufera fue la recogida de más de 46 millones de semillas (46.563.543) durante el año 2016 que, tras ser secada y almacenadas, se utilizaron para producir plantas en los Viveros Municipales del Sales, muchas de las cuales, posteriormente, se plantaron en el Parque Natural de la Albufera.