Opinión

Más leña al fuego

A estas alturas de la legislatura ya no tenemos dudas de que la gestión del diputado Josep Bort en el Consorcio Provincial de Bomberos ha sido un desastre. Que se lo digan a los trabajadores que se manifiestan en la plaza de Manises. Desde abril reclaman mejores condiciones laborales. No es de extrañar. El cúmulo de despropósitos es apabullante.

Resulta que hay decenas de interinos que han pasado dos procesos selectivos completamente diferentes y que siguen sin plaza. La tasa de interinidad ha rebasado con creces lo establecido por ley. Además, estos trabajadores denuncian que se han vulnerado las bases de la oposición, los principios de igualdad mérito y capacidad así como la obligación de cubrir reglamentariamente todas las vacantes.

En la misma línea, reivindican que los interinos de nuevo acceso tengan las mismas condiciones que los funcionarios, que por ejemplo, sí cobran dietas y desplazamientos. Esto supone que haya bomberos que se tengan que desplazar de un parque a otro, avisados con sólo 24 horas de antelación, teniendo que trasladar sus trajes, a veces contaminados por el fuego, en desigualdad de condiciones respecto a sus compañeros.

Hace más de un año que los trabajadores están dialogando con la dirección e incluso la junta de personal, que representa a todos los sindicatos, ha solicitado la adición de todas las vacantes generadas hasta fin del proceso; pero parece que Bort tiene otras prioridades.

Es incomprensible que los que en la oposición son ultra defensores de los trabajadores; cuando gobiernan, conviertan los derechos laborales en agua de borrajas. Cambian de vara medir igual que cambian las camisetas por los coches oficiales. Así, sin más, en un abrir y cerrar de ojos.

A este problema se suman otras actuaciones reprochables en la gestión del diputado de Compromís en la Diputación. La primera, por la cual Ciudadanos (Cs) ya ha pedido su dimisión, es el uso del taller del parque móvil de la Corporación provincial para beneficio propio. El diputado ha admitido que le repararon allí su coche. No entraré a valorar sus excusas contradictorias. Sólo defiendo que si Bort actúa de esta manera, cuanto menos deshonesta, ha de irse a su casa. No puede permanecer en el cargo si usa los recursos públicos para su beneficio personal.

Otra decisión de dudosa opacidad es un viaje a Ibiza. En septiembre el diputado viajó a la isla junto a al jefe del Cuerpo y algunos bomberos del Consorcio a las 'II Jornadas Técnicas de Inteligencia y Emergencias' organizadas por la Asociación Española de Lucha contra el Fuego (ASELF). Hasta aquí, correcto. Sin embargo, hay sombras como: por qué no se cuelga este viaje en el portal de Transparencia, cuánto ha costado, y bajo qué criterios se elige a unos bomberos y no a otros para el viaje.

Además, y este asunto es más grave, por qué se llevó a Ibiza la única URT (Unidad de Riesgos Tecnológicos) que tiene el Consorcio.Aunque los bomberos de la ciudad de Valencia tienen una similar, no son exactamente iguales, lo que supone que los bomberos del Consorcio no tengan la misma habilidad para utilizarla, su uso es tan específico que se hacen cursos para conocer cada modelo. De esta manera, si la provincia hubiese sufrido un riesgo nuclear, químico o bacteriológico, los bomberos habrían tenido que enfrentarse a él sin los instrumentos para los que se han formado. No seguiré con "lo que podría haber pasado" porque no quiero ser alarmista. No obstante, sí diré que esa decisión es arriesgada y nada previsora. Es echar más leña al fuego de la insensatez.

Ha quedado claro que el discurso de Bort a favor de la transparencia no va más allá de su propaganda política. Debería dimitir y dar paso a personas más íntegras. Espero que sea así y que se resuelva de una vez por todas la situación de los bomberos interinos. Han pasado sus pruebas y no pueden permanecer más tiempo bajo el paraguas de la inestabilidad porque no se ajusta a derecho. Los políticos estamos para cumplir la ley y para buscar soluciones. Estamos para apagar incendios, no para avivarlos.