Desde hace 3 años, el segundo domingo de junio se celebra en toda España el Día Nacional de la Moto. Se trata de una iniciativa impulsada por la Plataforma Motera de la Seguridad Vial, una organización sin ánimo de lucro que aglutina a motoclubes, peñas moteras y moto groups de Valencia, Madrid, La Rioja, Canarias, Baleares, Galicia, Cataluña, Castilla y León, Castilla-La Mancha y Andalucía, con el objetivo principal de revindicar la seguridad vial en todas las poblaciones, vías, autovías, autopistas y carreteras del Estado Español, de todos los usuarios de las mismas.
Una reivindicación, la de la Seguridad Vial, que desde la Diputación de Valencia compartimos plenamente, como lo demuestra el hecho de que somos una de las pocas administraciones provinciales que cuenta en su Área de Carreteras con un Servicio específico dedicado a la Seguridad Vial, que de forma transversal participa en el impulso y planificación de todas las actuaciones que llevamos a cabo.
No debemos olvidar que en la Diputación de Valencia gestionamos una red de más de 1.800 kilómetros de carreteras de las denominadas “secundarias”. Carreteras que conectan nuestros municipios y comarcas entre sí y con las principales arterias de comunicación (autovías, carreteras nacionales y autonómicas). 1.800 kilómetros de vías que son transitadas diariamente por la práctica totalidad de los valencianos y valencianas, y en cuyo mantenimiento, actualización y mejora invertimos cada año cerca de 40 millones de euros, a fin de asegurar las mejores condiciones de vialidad y, sobre todo, de seguridad.
Y es que, el estado de la vía es uno de los tres factores, junto al vehículo y el propio conductor, que intervienen en la seguridad vial, y, como administración gestora de esas vías, en la Diputación de Valencia somos plenamente conscientes de nuestra responsabilidad y, yo diría, obligación, de mantener su buen estado para reducir en la medida de lo posible la accidentalidad, evitar más muertes en carretera y lograr una red óptima para el disfrute de una conducción segura.
Dentro de esta obligación y responsabilidad, en el Área de Carreteras de la Diputación de Valencia sabemos que en la carretera existen usuarios que son especialmente vulnerables y a los que debemos prestar especial atención, y no hablo solo de los usuarios no motorizados, a los que hemos dado en llamar esos “otros” usuarios de la carretera. Ciclistas y peatones que deben compartir en muchas ocasiones espacio con los vehículos a motor y en cuya protección estamos trabajando activamente mediante la creación de una amplia red de ciclopeatonales que fomenten la movilidad sostenible y segura, en paralelo a la carretera, pero segregada de esta.
Dentro de los usuarios vulnerables de la carretera están también los y las motoristas, cuya especial vulnerabilidad viene dada por el hecho de que ante un accidente carecen de un carrocería que les proteja, siendo sus cuerpos quienes reciben directamente el impacto. Pero también porque la particularidad de moverse en un vehículo de dos ruedas y no de cuatro, les hace especialmente sensibles a las condiciones adversas de la vía, como una adherencia insuficiente, la presencia de obstáculos y tierra, peraltes mal resueltos o la existencia de cunetas profundas, factores pueden acabar provocando salidas de vía, derrapes y caídas fatales, cuyo resultado puede ser aún peor en el caso de producirse en una zona en el que las denominadas barreras quitamiedos carezcan de un faldón de protección adicional.
Y si bien en el primer caso, el de la vulnerabilidad derivada de una falta de carrocería protectora, la administración no puede actuar y es responsabilidad del propio motorista ir debidamente equipado con elementos de protección (casco, motos, botas, guantes y otros elementos de seguridad pasiva), en el segundo caso, el de las condiciones de la vía, las administraciones sí podemos poner medidas para evitarlo, y en eso es precisamente en lo que en la Diputación de Valencia trabajamos activamente desde hace varios años.
Porque la seguridad de todos los usuarios que circulan por las carreteras es nuestro principal compromiso, y aunque no es el estado de la vía el único factor que interviene en ella, pues también el estado del vehículo y la propia actitud del conductor tienen un papel importante en su consecución, sí es en lo que nosotros, como administración, podemos actuar.
Con el ánimo de contribuir a la concienciación en torno a un tema tan importante como el de la seguridad en nuestras carreteras y la importancia de que todos los agentes implicados trabajemos por su consecución, en estrecha colaboración, para conseguir llegar al objetivo de cero muertes en carretera, en la Diputación de Valencia decidimos sumarnos ayer a la celebración ayer del Día Nacional de la Moto, acogiendo el acto organizado por la Plataforma Motera de la Seguridad Vial en Valencia.
Porque como rezaba este año el lema del Día Nacional de la Moto, “La Seguridad Vial se fomenta con tu ejemplo”, en este caso, el de los motoristas, pero nosotros también jugamos un papel muy importante para lograrla.
Por Pablo Seguí Granero, Diputado de Carreteras e Infraestructuras de la Diputación de Valencia