La calidad del aire en Valencia ha empeorado con respecto a los valores medidos en años anteriores. Ahí entra en escena la discusión sobre si la ubicación de los sistemas de captación de contaminación atmosférica en la ciudad son los adecuados.
La realidad es que la ubicación actual de los medidores de contaminación atmosférica en Valencia se aleja sustancialmente de lo que marca el Real Decreto 102/2011. Las actuales ubicaciones de las estaciones, en Politècnic, Vivers, Avenida de Francia, Molí del Sol, Bulevard Sud y Pista de Silla, no son representativas en cuanto al nivel de exposición de la población.
El hecho de que estos medidores se encuentren, en su mayoría, alejados de grandes vías y en zonas abiertas, que favorecen la dispersión de contaminantes, puede que falsee, en mayor o menor medida, la visión que podamos tener del estado de la polución del aire exterior.
De hecho, existen zonas en Valencia con elevado caudal de tráfico y con alto nivel de paso que constituyen una incógnita a nivel de calidad del aire. Un hecho que los valencianos, ni pueden, ni deben permitirse.
En la actualidad, no hay ningún medidor fijo en el centro de la ciudad, como sí sucede en otras grandes ciudades, me gusta poner como ejemplo las ciudades de Vitoria o Madrid.
Desde Ciudadanos creemos importante que existan medidores de polución en el centro de las ciudades y así lo solicitamos en la Comisión de Medio Ambiente del pasado mes de abril. Consideramos que es un tema lo suficientemente relevante como para prestarle más atención. Parece necesario que desde el Ayuntamiento se inste a la Generalitat a revisar el posicionamiento de las actuales estaciones de medida, además de que se incremente el número de estaciones fijas para conocer, de primera mano y con seguridad, la realidad que afecta a los ciudadanos en los puntos más conflictivos de la ciudad.
Nuestra sorpresa fue la decisión del tripartito de instalar una nueva estación en la Plaza del Ayuntamiento, ya que, aunque es una ubicación céntrica, no es representativa de la exposición de la población y mucho menos cuando está prevista la peatonalización parcial de esta plaza. No entendemos este gesto, ni su finalidad.
Parece más una declaración de intenciones o una iniciativa con fines electoralistas, que una estrategia realista destinada a la mejora de la calidad de vida de los ciudadanos.
En Ciudadanos exigimos rigor al tripartito a la hora de afrontar asuntos tan transversales y de tanta envergadura como es el medio ambiente. Por eso propusimos, y salió adelante en el Pleno con el respaldo de todos los grupos, que el Ayuntamiento de Valencia se adhiera al Observatorio Mundial de Contaminación del Aire. Es muy interesante que, independientemente del partido político, esta iniciativa saliese adelante. Pertenecer a organismos internacionales que recopilan información y estrategias para la lucha contra la contaminación del aire, nos puede marcar caminos para acercarnos a un entorno ambiental menos contaminado.
Recordemos que la contaminación del aire es una cuestión de salud pública, se trata de un problema que la Agencia Europea del Medio Ambiente (AEMA) no ha dudado en calificar como el principal riesgo de salud medioambiental en Europa.