El debate de Política General ha vuelto a demostrar que los grandes proyectos de transformación para València vienen de la mano de los socialistas. Pero de una transformación real, de calado, de la que llega a todas y todos para mejorar nuestra calidad de vida, generar nuevas oportunidades y convertirnos en una gran ciudad metropolitana, solidaria y sostenible.
El plan para salvar la Albufera; la adopción de las competencias en Cercanías para mejorar nuestra movilidad metropolitana y coordinarla mejor, también a través de la Autoridad Metropolitana de Transporte, como proponemos los socialistas en la ciudad y crear un gran corredor verde que conecte todos los Pobles del Sud con nuestro Parque Natural son propuestas que van esa dirección.
Tienen esa doble visión que nos hace más grandes y que nos saca de las fronteras (ahora) invisibles que siempre han delimitado nuestra ciudad y encorsetado detrás de las murallas. València es una gran ciudad y debe ejercer esa capitalidad gracias una red de transporte público que la una con su entorno y que la fortalezca económicamente porque abrirá nuevos espacios de conexión con las áreas industriales de su entorno más próximo.
Y en ese planteamiento de impulsar proyectos sostenibles que al mismo tiempo articulen una nueva movilidad tanto dentro de la propia ciudad como hacia afuera coinciden plenamente los socialistas en los dos ámbitos de gestión, el autonómico y el municipal. El corredor verde que anunció el president de la Generalitat, Ximo Puig, de hecho, desprende la misma filosofía y valores que los proyectos que está impulsando el grupo municipal socialista y que combinan la renaturalización de espacios urbanos con una reordenación de usos viarios que devuelven la preferencia al viandante frente al vehículo privado.
Es el caso, por ejemplo, de la propuesta de reurbanización de Ausiàs March que hemos lanzado desde Urbanismo y que plantea eliminar la autopista en la que se había convertido esta vía de acceso a la ciudad para generar nuevas zonas verdes y espacios peatonales con los que mejorar la calidad de vida de nuestros barrios.
La misma labor, la reconciliación de València con el medio natural, ejercerá el proyecto para rescatar nuestra gran joya verde: la Albufera. La inversión de 600 millones que anunció el president servirá para dejar atrás de una vez por todas los problemas que arrastra el lago desde hace más de una década como consecuencia del olvido al que lo sometió el PP.
El plan para salvar la Albufera, el corredor verde o la nueva Ausiàs March, en definitiva, son una muestra de los principios ecologistas que impregnan al PSPV-PSOE y que se están implementando en toda la Comunidad Valenciana y en la ciudad de València desde 2015 gracias al impulso decidido de los gobiernos socialistas.