Si estos últimos días hay un tema en boca de todos en nuestra ciudad es, sin duda, la movilidad. En tan solo unos meses hemos visto cambiar el escenario de nuestras calles y aceras, incorporándose nuevos medios de transporte a nuestro día a día, transformando la forma en que nos relacionamos con nuestro entorno.
Afirmaba el arquitecto y urbanista brasileño Jaime Lerner en una entrevista reciente que “no hay futuro urbano si el transporte depende de los vehículos particulares”. Este “visionario de la sostenibilidad”, que revolucionó el mundo al crear el metro con ruedas, vaticina que los coches serán residuales y se emplearán para “viajes y ocio, no para la ciudad”. Este cambio de paradigma debe ser asumido y reflexionado desde las administraciones públicas. No podemos negar los avances, las nuevas demandas de la ciudadanía… ya es ayer cuando hablábamos de las bicis, hoy el car-sharing o los patinetes eléctricos, y mañana tendremos que empezar a debatir qué hacemos con los medios de transporte autónomos.
Cabe decir que si hoy nos estamos planteando estos debates es porque vivimos en una ciudad moderna, que comienza a ser un lugar de referencia para muchas empresas tecnológicas, que nos ven como una València de progreso, que mira al futuro. Además, las características de nuestra ciudad la hacen ideal para implementar políticas de movilidad personal sostenible, con medios de transporte ecológicos, flexibles… En definitiva, como decimos: políticas de movilidad del futuro.
Y es que si nuestra ciudad está trabajando por posicionarse como una ciudad de vanguardia, debemos trabajar por adelantarnos a los tiempos que corren, o al menos, por no quedarnos a la retaguardia. Estamos en el momento de abordar el debate sobre cómo incorporamos las nuevas opciones de movilidad a nuestras calles y barrios, en permanente contacto con las necesidades y usos de la ciudadanía. Una ciudadanía que ya está demandando soluciones, que ya ha incorporado nuevas formas de movilidad, y a la que se debe dar respuesta.
Además, no podemos olvidar que en nuestra ciudad hay muchas empresas y emprendedores que trabajan en este sentido, por avanzar e incorporar cada vez más medios de movilidad sostenible, y desde las áreas institucionales que nos corresponden debemos facilitar su labor. En València, sin duda, serán bienvenidas todas aquellas formas de movilidad respetuosas con el medio ambiente y que fortalezcan nuestra economía, empresas e imagen de ciudad innovadora. València debe ser un referente de progreso tecnológico, pero también de progreso social y de calidad de vida para las personas que la habitan.
Para ello, necesitamos la colaboración de todas las partes implicadas. Queremos escuchar a todas las empresas que quieran implantarse en nuestra ciudad siguiendo este modelo de movilidad, pero sabiendo que deben respetar siempre las regulaciones públicas que les sean de aplicación. Y, del mismo modo, entendemos que desde las administraciones debemos dar respuestas rápidas y eficaces a las nuevas demandas. Demandas que no son del futuro si no que ya están aquí, en nuestras calles, siendo utilizadas por nuestras vecinas y vecinos. Gobernar es eso, escuchar a todas las voces y encontrar vías de entendimiento. Así, y no de otra forma, construiremos entre todas y todos la ciudad del futuro.
Javier MateoSubdirector de Emprendimiento de València Activa