El anuncio realizado por el alcalde de Valencia, Joan Ribó, en el debate del estado de la ciudad, de la creación de un corredor verde en el nuevo cauce del Turia, es un verdadero disparate. Una ocurrencia totalmente inoportuna con la que el acalde ha tratado de tapar el fracaso de su gestión.
El Plan de Acción Territorial sobre la Prevención del Riesgo de Inundación de la Comunitat Valencina (PATRICOVA) considera el nuevo cauce del Turia de nivel 1 de máxima peligrosidad con frecuencia alta de inundación. Con una alerta de gota fría para varios días en Valencia, y justamente cuando se cumplen 61 años de la riada de 1957, la propuesta de Ribó, sin ningún aval técnico que garantice la seguridad de este corredor, me parece un desvarío y una irresponsabilidad.
Esta enorme infraestructura hidráulica es fundamental para evitar las avenidas del río, por lo que plantear cualquier construcción en su lecho, es una irresponsabilidad muy grave del alcalde si no se cuenta con la máximas garantías de la Confederación Hidrográfica del Júcar y de los colegios de ingenieros.
Ribó se presentó al Pleno del debate del estado de la ciudad con un balance de gestión pésimo, y ante la falta de propuestas atractivas y lo aburrido de su discurso, se sacó de la manga un anuncio ficticio, que a día de hoy más parece una ocurrencia política que un proyecto real.
El tripartito está ya de salida de la alcaldía de Valencia, y aunque queden todavía 8 meses para las Elecciones Municipales, Ribó y sus socios de gobierno ya han dejado sus responsabilidades con la ciudad en un segundo plano. Su preocupación pasa ahora solamente por ver quién es capaz de inventarse un eslogan más impactante, con independencia de si es falaz o fruto de sus mejores sueños.
En el debate del estado de la ciudad vimosde nuevo a un tripartito dividido, agotado y sin ideas, sin ninguna ambición por Valencia, y más pendiente del calendario electoral que de las necesidades y preocupaciones de los valencianos.
Eusebio MonzóPortavoz del Grupo Municipal Popular