Hace más de treinta años que la Fundación de los Ferrocarriles Españoles se dedica a darle una segunda vida a líneas ferroviarias en desuso, o que incluso nunca llegaron a estar en funcionamiento. Fue en 1993 cuando el proyecto de Vías Verdes comenzó su andadura, y ahora más de 3.400 kilómetros de infraestructuras de tren obsoletas en todo el territorio nacional se han mimetizado con el entorno para generar grandes itinerarios cicloturistas y senderistas.
La Comunitat Valenciana, con la provincia de València a la cabeza, es uno de los rincones de la geografía española que atesora un mayor patrimonio de líneas férreas abandonadas que traman sus diferentes comarcas. Por ello, el proyecto Vías Verdes se propuso dinamizar nuevas rutas en las que poder pasar un agradable día en familia, realizar un ameno paseo o disfrutar de la naturaleza evadiéndose de la rutina.
En total, la provincia valenciana suma más de 145 kilómetros de Vías Verdes repartidos en seis lugares: La Safor, Lliria, L’Horta Nord, el trazado de l’Antic Trenet (entre Carcaixent y Tavernes de la Valldigna), un paseo urbano por la localidad de Manuel, y una ruta que enlaza Barracas (Castellón) con Albalat dels Tarongers (València). A continuación, vamos a desgranar los principales detalles de cada una de ellas.
Vía Verde de La Safor
Este itinerario cercano a los 7 kilómetros sobre la antigua línea férrea de Carcaixent-Dénia conecta la turística ciudad de Gandia con la esencia mediterránea en Oliva. La vía verde, conocida como las rectas del azahar por el reconocible perfume de esta variedad floral, atraviesa un mar de naranjos en paralelo a la costa. A lo largo del trayecto en un laberinto de acequias se cruzan dos pasos inferiores, uno superior y un puente. La antigua vía ferroviaria es ahora una ruta amable que permite visitar pueblos cercanos como Bellreguard y Rafelcofer o proseguir hasta el Parque Natural de la Marjal Pego – Oliva. Además, conecta con otros caminos que permiten llegar hasta el Camino Natural Vía Verde de Dénia.
Vía Verde Ribera Costera
Esta ruta en el interior de la localidad de Manuel se trata de una de las pocas Vías Verdes de carácter exclusivamente urbano de la Comunitat Valenciana. En este caso, este estrecho itinerario de 1,8 kilómetros sobre asfalto que permite el paso de ciclistas y senderistas suponen los primeros pasos para la recuperación medioambiental del antiguo Ferrocarril Xàtiva-La Pobla Llarga. En un futuro, se pretende que esta reconversión de la vía férrea una los municipios de Manuel, La Pobla Llarga y Xàtiva a través de un proyecto que pretende favorecer la movilidad sostenible y ofrecer nuevas rutas en la comarca de La Ribera Alta.
Vía Verde de l’Antic Trenet
Las huellas de un tramo de la obsoleta línea de ferrocarril entre Carcaixent y Dénia vuelve a aparecer como otra de las Vías Verdes de la provincia de València para sumergirse en el encanto paisajístico que genera el contraste entre el interior y el litoral valenciano. La ruta de l’Antic Trenet atraviesa el territorio de la Ribera Alta en paralelo a la sierra de Corbera —cruzando Barraca d’Aigües Vives— y une diferentes caminos naturales en los que se entrelazan zonas asfaltadas con secciones de tierra compactada hasta Tavernes de la Valldigna. Supone una agradable alternativa senderista cercana a los 40 kilómetros de longitud adentrándose en dos túneles para salvar la autopista y una bonita pasarela.
Vía Verde de Xurra
La potente huerta valenciana protagoniza esta ruta que conecta la ciudad de València con Puçol a través de municipios como Alboraya, Meliana, Albalat, Massamagrell y Pobla de Farnals. En la actualidad, la comarca de l’Horta Nord está atravesada por dos líneas ferroviarias: la de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) hasta Rafelbunyol y la de Adif hacia Barcelona y Zaragoza. Sin embargo, en el pasado también existió una tercera vía que ya está desmantelada y que se ha convertido en un camino natural entre naranjos y productos de la huerta. Esta rectilínea ruta de 16 kilómetros se ha convertido en un amplio carril bici que conecta con otra propuesta en plena naturaleza en la Marjal dels Moros.
Vía Verde de Llíria
Esta ruta discurre sobre la plataforma del antiguo ferrocarril Llíria-València. Así, este itinerario llano de poco más de 5,7 kilómetros se ha convertido en un largo carril bici pintado de verde a través de los montes del Camp de Túria. La Vía Verde atraviesa el paisaje tradicional valenciano, con campos de naranjos y cultivos de la huerta camino del antiguo apeadero de Benaguacil, cerca de la fábrica de papel. Una vez allí, durante los trabajos de reconversión se instaló un área de descanso, mesas y aparcabicis a la sombra de los árboles. A partir de este punto, este corredor natural puede continuar, en este caso sin estar señalizada ni acondicionada, por caminos agrícolas por el Parque Natural del Túria.
Vía Verde de Ojos Negros
La Vía Verde de Ojos Negros, que comienza en las antiguas minas del valle de Jiloca, es la más larga de España con sus más de 167 kilómetros de longitud entre el interior de la provincia de Teruel y la costa mediterránea. Es por ello que el trayecto está dividido en dos tramos. En este caso, es el segundo el que transcurre íntegramente por territorio castellonense y valenciano. La ruta comienza en el altiplano de Barracas y atraviesa un entorno natural único siguiendo el curso del río Palancia sobre el inhabilitado ferrocarril minero de Sierra Menera.
En total, el itinerario discurre por más de 75 kilómetros plagados de sorpresas y un paisaje espectacular con una tendencia descendente (si se inicia en las montañas de Castellón). Una agradable alternativa para realizar de forma sosegada en bicicleta mientras se cruza por hasta dieciséis túneles estrechos y ocho puentes metálicos y de madera. Sin duda, se trata de una las alternativas rurales más interesantes para descubrir el interior desde una perspectiva diferente, calmada y en contacto directo con la naturaleza. Además, está previsto que pronto se habilite la conexión con la Vía Verde de Xurra para llegar a València