La secretaria general de Més-Compromís, Àgueda Micó, aboga para separar las elecciones autonómicas de 2023 de las generales, europeas y municipales porque los valencianos se centran en sus "problemas como pueblo" y no votan en clave estatal. "Tenemos oportunidad de marcar agenda política propia con unas elecciones valencianas", confía.Así lo asegura en una entrevista con Europa Press después de revalidar su cargo a finales de junio en el VIII Congreso del Bloc, cónclave en el cual la formación, integrada en Compromís, aprobó el cambio de nombre para ampliar sus bases y "recuperar las calles".Pero Micó descarta que esta "actualización o refundación" significó dejar atrás el nacionalismo, sino incluir "todas las luchas y apoderamientos sociales del valencianismo" como el feminismo, el ecologismo o el antifascismo. "Es compatible, el nombre no hace la cosa. Nuestro proyecto continúa siendo igual de soberanista", afirma.A partir de aquí, después de seis años desde la entrada "masiva" de Compromís a las instituciones, defiende que el valencianismo puede asumir cualquier reto y necesita ampliarse y "incorporar a mucha gente nueva". "El Pais Valencià necesita un proyecto valencianista sólido que pueda marcar agenda política y sea clave para la gobernabilidad", reivindica, y apunta en Compromís como "dique de contención" contra la extrema derecha.Para conseguirlo, aboga porque las "cruciales" elecciones valencianas de 2023 sean en una fecha separada del resto, como las de Cataluña, Galicia, Euskadi o Andalucía. "Hasta Ayuso lo ha hecho", recuerda, para criticar que el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, "no estuvo a la altura" en 2019 al hacer coincidir las autonómicas con las generales.
"NO HAY DESLEALTADES" AL BOTÀNIC
Esto demuestra, a su juicio, que "a veces" el PSPV no entiende el que implica compartir gobierno, con "incongruencias" como la ampliación del Puerto de València o intentar crear una empresa pública para revertir servicios sanitarios externalizados, iniciativa que al final ha decaído. "Los gobiernos de coalición se basan en la lealtad mutua", subraya.Con todo, Micó destaca la reedición del Botánico en 2019 como ejemplo a seguir en España y un gobierno que ha sabido estar "a la altura" de la pandemia. "En Compromís tenemos clarísimo que, por encima de todo, están los intereses de los valencianos", lo cual voz como una muestra de coherencia, recalca.Aunque voz inevitable que en un tripartito salgan a la luz las discrepancias, apuesta para normalizarlas, descarta que ponen en peligro el pacto y asegura: "Aquí no hay deslealtades".La líder de Més Compromís alaba el papel de compañeros como Joan Baldoví en el Congreso o Vicent Marzà como conseller de Educación y espera contar con "toda la gente que está liderando este partido cuando llegan las elecciones", al mismo tiempo que muestra su confianza en la "madurez" del electorado".
OLTRA Y RIBÓ
Sobre el futuro de Mònica Oltra i Joan Ribó, vicepresidenta portavoz del Consell y alcalde de València, cree que es pronto para aventurarlo y que hay que "respetar su capacidad de decidir". "Nuestros liderazgos están consolidados y se han ganado un espacio", asevera, y aboga para decidir conjuntamente "la mejor manera de tener un buen cartel electoral".También voz positivo el papel de Unidas Podamos desde su entrada en el gobierno en 2019, mientras cuatro años antes "perdieron una oportunidad muy grande" al decidir no formar parte y ofrecer su apoyo parlamentario. "Querían asaltar los cielos y no participaron en los gobiernos del cambio", expone sobre el papel de Podemos liderado entonces por Pablo Iglesias.
FINANCIACIÓN Y OTROS PARTIDOS
Esto sí, Micó advierte que tanto UP como PSPV frenan sus reivindicaciones cuando chocan con las de sus partidos al Gobierno, especialmente con la financiación autonómica, y exige el apoyo de los 32 valencianos representados en el Congreso. "Vamos a presionar porque así sea", promete, y denuncia que "no han estado a la altura" ni Pedro Sánchez ni la ministra María Jesús Montero.Apuesta así para repetir la gran manifestación de 2017 contra la infrafinanciación y para aliarse con otras comunidades como Islas Baleares, mientras "el gobierno de Cataluña ha cambiado su actitud" desde los indultos. "Puede ser que sea un buen momento para habla de esto", augura.En esta línea, aboga para profundizar la relación de su partido con otros cuanto Más por Mallorca, Más Madrid o el BNG, proyectos que "pueden marcar el presente y futuro de las políticas de cohesión territorial" y con los cuales quiere colaborar "de igual a igual" pero presentándose a las elecciones por separado.
COMPROMÍS, DE COALICIÓN A FEDERACIÓN
En clave interna, insiste en su objetivo que Compromís pueda convertirse en una federación de partidos, una cosa que "dejó caer" Oltra (Iniciativa) en su discurso en el congreso del Bloc. "Siempre hemos querido un proyecto unitario, pero somos muy respetuosos con nuestros socios", puntualiza.Es un hecho que voz factible a corto o mediano plazo en función de "los tiempos de Iniciativa", que tiene que convocar su congreso en los próximos meses, y que cree que también sería apoyado por la candidatura alternativa a la suya, que obtuvo el 36,7% de los votos en el congreso. "Es una cuestión de voluntad política, de sentarse a hablar", constata.Entre sus objetivos también está sumar apoyos al sur de la Comunidad junto a los movimientos cívicos, celebrar más convenciones nacionales o captar adhesiones gracias a la nueva figura del activista -no pagan cuota a diferencia de los afiliados y militantes-. "Necesitamos reinventarnos y que la gente se sienta cómoda", resume, además de valorar la reciente incorporación de alcaldes independientes o adscritos a la coalición.
