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La evolución de la pandemia en la Comunitat Valenciana presenta datos esperanzadores como que el 62% de los municipios no registra nuevos casos positivos, que las altas se han triplicado o que la tasa de incidencia es de 26 valencianos por cada 100.000, "la tercera parte de la media de España", tal y como ha apuntado el president de la Generalitat, Ximo Puig. Y es que la Comunitat Valenciana se prepara para iniciar el proceso de desescalada con diferentes medidas que se irán poniendo en marcha gradualmente y bajo supervisión.
De esta manera, el próximo jueves, 30 de abril, la Generalitat Valenciana ha autorizado el montaje de los mercados no sedentarios de proximidad, siempre y cuando vendan productos de primera necesidad, y cumpliendo una serie de medidas para garantizar la higiene y la seguridad de la ciudadanía. Estos mercados, que se realizan en diferentes municipios de la Comunitat Valenciana, se podrán realizar si los diferentes ayuntamientos dan también luz verde.
Así, además de solo permitir la apertura de aquellos puestos de productos de alimentación y considerados de primera necesidad, los mercados de venta no sedentaria también deberán cumplir otras normas, como estar separados por una vía de tránsito y con una distancia mínima entre ellos de 6 metros, así como una separación lateral mínima de 2,5 metros entre puestos.
Por supuesto, se deberá garantizar el distanciamiento social. En este sentido, la resolución de la Conselleria de Agricultura y Economía, que adelantó Efe, establece que se debe mantener una distancia de 2 metros no solo con el cliente, sino también entre los vendedores de un mismo puesto. En caso de que no sea posible, tan solo podrá haber un vendedor en el puesto.
Otra de las medidas establecidas para el desarrollo de su actividad es que los mercados podrán seguir realizándose en los espacios habituales, ya sean lugares cubiertos o espacios al aire libre habilitados para tal fin, siempre y cuando estén delimitados con vallas u otros objetos que permitan marcar los límites, la separación entre establecimientos y entre clientes y el control de la afluencia.
En el caso de no poder cumplir con estas medidas, se podrán trasladar los mercadillos a otros espacios, como instalaciones deportivas o similares, que sí que permitan controlar el aforo y que se respete el distanciamiento social para evitar un repunte de contagios por Covid-19.
Finalmente, la Generalitat deja claro que se autorizan estos mercados de venta no sedentaria de productos de primera necesidad, pero se excluye a la hostelería y restauración.