El pleno del Ayuntamiento de Meliana, por unanimidad, ha aprobado un nuevo reglamento de productividades para el conjunto del personal municipal, tanto funcionario como laboral, además de concretar la aplicación de las gratificaciones por el trabajo realizado fuera de la jornada laboral. El documento estuvo trabajado durante la legislatura anterior por la entonces regidora de Personal, Maria Pilar Asensio; y durante un tiempo se ha aplicado en pruebas en diferentes departamentos hasta su aprobación. Además, ha contado con el dictamen favorable y unánime de la Mesa de Negociación.
Para el alcalde y responsable del área de Personal, Josep Riera: "tomando como base el reglamento hasta ahora existente, se ha buscado un reglamento que pudiera llegar además personal y más departamentos, con criterios objetivos y evaluables que permiten valorar el trabajo individual pero, además, mejorar como organización". Así, se han establecido tres tipos de productividad para atender las diferentes circunstancias que se ha considerado que hay que valorar con este complemento económico que está fuera de las retribuciones básicas.
La productividad A, de periodicidad trimestral, incide el alcalde: "tiene la finalidad de valorar los aspectos individuales de cada trabajador o trabajadora con relación al puesto de trabajo y la realización de las funciones de acuerdo con unos parámetros concretos". Entre otros, el absentismo; la flexibilidad en la interpretación de las funciones propias; la organización del trabajo, tiempo y costes; la actividad extraordinaria; la carga de trabajo no propia; las acciones formativas impartidas o recibimientos; o la iniciativa y las aportaciones. Los diferentes apartados se puntúan de acuerdo con unos parámetros y la puntuación total se aplica en una fórmula vinculada a los complementos de destino y el específico 1 de cada puesto de trabajo.
En cambio, la productividad B, en este caso cuatrimestral, está vinculada al trabajo, la organización y el funcionamiento de los departamentos. Se fijan unos objetivos, con un porcentaje de importancia para cada uno de ellos y evaluables de acuerdo con el grado de desempeño, también con unos parámetros concretos. La finalidad, detalla el responsable del área, "es poder planificar el trabajo y avanzar y mejorar como organización con un sistema en qué pueda participar, además, el conjunto de cada departamento".
También se aplica sobre un porcentaje de la suma del complemento de destino y el específico 1, los dos complementos más objetivos y más generalizados de la relación de puestos de trabajo vigente al Ayuntamiento.Finalmente, hay la productividad C para compensar aquellas situaciones en que, durante un periodo largo de tiempo, un trabajador o trabajadora realiza funciones de categoría superior por motivos diferentes. También se unifican para todo el personal las gratificaciones por el trabajo realizado fuera de la jornada laboral. Concluye Riera: "el nuevo reglamento pretende ser una herramienta de trabajo útil, objetiva y que se pueda ir adaptando a las nuevas realidades que se puedan ir generando en la gestión del personal municipal muy especialmente en situaciones extraordinarias como las vividas con la crisis sanitaria y el estado de alarma".