La actividad humana es, actualmente, la principal causa de extinción animal. Sea por sobreexplotación, caza, o destrucción de sus hábitats naturales. En la Comunitat Valenciana este proceso también está 'vivo', con uno de los principales escenarios a unos pocos kilómetros de la capital autonómica, la Albufera. En el territorio hay catalogadas 17 especies animales en peligro de desaparecer. Algunas que viven en otros lugares del mundo, otras cuyo único hábitat es en el territorio valenciano.
Contaminación del agua, caza furtiva, aumento de la temperatura, especies exóticas invasoras... Son muchas las opciones que pueden mermar en el equilibro natural y hacer peligrar una especia; en la mayoría de casos, detrás hay una mano humana. Es el caso del icónico y estudiado Samaruc. Pero también de animales más grandes como la tortuga mediterránea o mamíferos, como dos especies de murciélago.
Agua
La mayoría de las 17 especies catalogadas como en "peligro de extinción" tienen un factor común: dependen de medios acuáticos. Se trata, principalmente, de peces y aves que han sido cazados y han visto como sus hábitats se degradaban.En morado, la distribución actual de las poblaciones de Samaruc // GVA
El mencionado Samaruc, así como otro pequeño pez, el Fartet, viven en aguas tranquilas y costeras del área mediterránea, la mayoría en la Comunitat Valenciana y, en menor medida, Catalunya, Murcia y la parte mediterránea de Andalucía. La principal causa de su peligro tiene fondos económicos y políticos; la especulación urbanística que, muchas veces sin control, se hacía a expensas del medio ambiente. La desaparición de humedales -también por efecto del cambio climático- y el vertido de aguas sin tratar les ha llevado al límite.
Desde hace más de 10 años, la recuperación de estas especies viene dada, sobre todo, por la cría en cautividad. Las poblaciones existentes actuales están amenazadas, de nuevo, por la acción humana; se introdujo un pez exótico, la gambusia, que se come los huevos del Samaruc.
Aves
Fotja banyuda, una de las aves residentes en humedales valencianos en peligro de extinción // PîxaBayDistintos tipos de aves ocupan la mayoría de la lista de estas especies amenazadas y, sobre todo, aquellas que también necesitan de un medio acuático. El Roget, el Anec capblanc o la Rosseta son algunas de las aves, de la familia de los patos, que están en esta situación. La causa, de nuevo, es la caza y la destrucción de hábitats, que en muchas ocasiones comparte con los peces amenazados.
Con los pájaros, es importante tanto el control de la caza furtiva, como la mejora de sus ecosistemas y el 'trabajo de campo'; recoger la fauna herida o desvalida -crías- para su recuperación y puesta en libertad. Es el trabajo que realizan, por ejemplo, en el Centro de Recuperación de Fauna La granja de El Saler. En el balance de actividades de 2018, 22 especies amenazadas pasaron por el centro; desde la garza imperial o el aguilucho lagunero, ambos habituales en la Albufera, hasta la nutria europea, poco común en la Comunitat.
Problema local y mundial
Las amenazas a la fauna local son una realidad. En el Parque Natural más conocido de la Comunitat Valenciana, la Albufera, la falta de agua puede hacer peligrar la recuperación del lago y, con él, el de las especies amenazadas que habitan. El problema, sin embargo, va mucho más allá del territorio valenciano.Según el pasado informe de la Plataforma Intergubernamental sobre la Biodiversidad y los Servicios Ecosistémicos (IPBES), la amenaza es "crítica"; de los aproximadamente ocho millones de especies animales, un millón, el 12,5%, están amenazadas por la extinción y podrían desaparecer de la Tierra en décadas. Son necesarias medidas "urgentes" a todos los niveles administrativos.