- Intu mediterrani encuentra un apoyo en el TSJCV, pero suma contrarios
- La Coordinadora per la Protecció de Les Moles pide reunirse con el Botànic sobre Intu Mediterrani
Al norte de Paterna, a unos ocho kilómetros del centro de València, hay un enclave verde en el que conviven huerta tradicional y masa forestal. Un espacio rodeado por un centro comercial al noreste, una autopista al noroeste, y un polígono industrial al sur. Conocido como Les Moles, es un espacio natural que recoge varias rutas frecuentadas por ciclistas, senderistas y mascotas. Unas rutas 'entre verde' que una gran empresa británica pretende transformar en cemento.
El proyecto de Intu Mediterrani pretende crear, en este espacio, un macrocentro comercial que arrase con más de 1,5 millones de metros cuadrados. Los argumentos de la empresa para afincarse son conocidos; más empleo y riqueza para la zona. Los argumentos en contra también; más tránsito y contaminación, afección al comercio local y de proximidad pero, sobre todo, la pérdida de un "pulmón verde".
Desde la Coordinadora per la Protecció de Les Moles se ejerce la principal presión para que la política valenciana se reafirme contraria a Intu Mediterrani. Una actividad que, tras la última sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana, que puede dar una nueva oportunidad al macrocentro, se ha vuelto más intensa por "necesidad".
Por ello, desde la Coordinadora han impulsado una campaña de crowdfunding. Buscan conseguir, de aquí a 34 días, 3.000 euros para realizar diversas campañas de concienciación sobre Les Moles: "Para forzar a las administraciones a recurrir la sentencia y protejan definitivamente Les Moles, hay que invertir en campañas de sensibilización ciudadana y presión política", señalan sin rodeos en la petición.
Tres vídeos cortos, paneles explicativos, excursiones y y una exposición fotográfica, entre diciembre de 2019 y febrero de 2020, es lo que propone la Coordinadora, que ya ha reunido alrededor de 500 euros. Creen que los motivos para proteger el paraje son de peso: destruiría este y también el "tejido comercial de la comarca", provocaría paro, inestabilidad económica, "saturaría la CV-35" y, además, con el tráfico rodado aumentaría también la contaminación. Un proyecto que choca con la declaración de Emergencia Climática realizada por la Generalitat Valenciana.
"Ho paguem tots"
El Govern del Botànic II, con unos pocos meses de vida, señaló en los discursos de investidura su compromiso con la "emergencia climática", el pequeño comercio e incentivar el consumo "de proximidad y temporada"; cuestiones muy relacionadas entre sí. Esto choca con Intu Mediterrani que, aunque rechazado en un primer momento por el Consell, ahora encuentra un apoyo en el TSJCV.
Desde la Coordinadora, asociaciones ciudadanas y ecologistas -como Per l'Horta- y diversas personalidades, exigen a la Generalitat que recurra la sentencia por coherencia. "Además, la multinacional ha pedido una indemnización de 150 millones de euros por lucro cesante. Si el Consell no interpone recurso, nos encontraremos en la paradoja de, además de perder Les Moles, lo pagaremos con nuestros impuestos", aseveran desde la Coordinadora.