La Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica encara la campaña de prevención de incendios reforzando el personal dedicado a la prestación del servicio de vigilancia preventiva.
La ampliación de la encomienda incorpora a 47 personas que, entre principios de julio y mediados de octubre, se encargarán de la gestión tanto de la eliminación de la biomasa como de diferentes infraestructuras de lucha contra el fuego, como los depósitos de agua, la adecuación de fajas auxiliares de acceso a los caminos o los observatorios forestales.
Así, la Conselleria concentra sus esfuerzos en las tareas de prevención con una inversión de 441.464 euros para ultimar la reparación de los desperfectos que causó el temporal Gloria del pasado mes de enero. Unas tareas declaradas esenciales pero que, en algunos casos, no se han podido desempeñarse con normalidad debido al impacto de la crisis sanitaria del coronavirus.
El director general de Prevención de Incendios, Diego Marín, ha explicado que las lluvias intensas, por encima de lo habitual, durante los meses de marzo y abril "han provocado un aumento de la vegetación, que obliga a intensificar las labores de desbroce en observatorios, depósitos e instalaciones recreativas ".
El personal estará formado por 11 unidades de actuación, dotadas de un vehículo y el material necesario, así como de un técnico o técnica y dos encargados o encargadas.
Este refuerzo reorienta los recursos hacia la prevención, una vez finalizados los trabajos de las brigadas encargadas del mantenimiento y conservación forestal que pasarán a integrar la bolsa de empleo de Vaersa.