Aemet prevé que la temperatura media en la Comunitat Valenciana suba hasta seis grados a finales de siglo si no actúa ya en el control de la emisión de gases. Por el contrario, si se comienza a aplicar medidas contra el cambio climático se conseguiría estabilizar el crecimiento en torno a los dos grados.
Así, lo ha advertido este miércoles el delegado de la Agencia Estatal de Meteorología en la Comunitat Valenciana, Jorge Tamayo, en la rueda de prensa para hacer balance y en la que ha avanzado que se prevé un invierno seco y con temperaturas más altas de lo normal tras un 2019 "muy cálido" y con lluvias que han sido pluviométricamente normales pero que han caído de forma más concentrada, como viene siendo lo habitual en la última década.
Al respecto, ha explicado que las proyecciones del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático, en su quinto informe, prevé una "inevitable" subida de las temperaturas hasta mediados de siglo. A partir de ahí, se han marcado dos escenarios posibles: el "más adverso", si no se adoptan políticas de control de gases, que podría hacer elevar la media hasta seis grados, mientras que el "optimista más realista" conseguiría una estabilización en el año 2100 y un incremento no mayor de dos grados.
Tamayo ha recalcado que la evolución de la temperatura media es "coherente" con las previsiones para el siglo XXI, es decir, que "lo que está pasando, con años cada vez más cálidos, se ajusta a lo que los modelos pronostican que van a pasar". Así, el año 2019 será probablemente el décimo más cálido en la serie de temperatura media anual desde 1941 y de ellos solo dos se registraron fuera del siglo XXI, el año 1961 y 1994.
En concreto, la temperatura media de 2019 será probablemente de 15,8 grados, 0,5 grado superior a la del promedio climático normal, mientras que la precipitación un 1% inferior.
Al respecto, salvo abril, que fue ligeramente frío, el resto de meses han resultado más cálidos de lo normal, destacando julio, octubre, febrero y el periodo de 17 días que han transcurrido dediciembre, está resultando muy cálido. El día más cálido del año 2019 fue el 9 de agosto, un día de viento de poniente que elevólas temperaturas por encima de 42 grados en localidades de València y Alicante.
Sólo hubo un episodio frío en el invierno y, además, fue breve. Se registró los días 10 y 11 de enero, que fueron los más fríos de 2019, cuando se produjo la invasión de una masa de aire polar muy seca que dejó una mínima de -11.4 grados y se registró en el observatorio del pico Gavilán, en la Puebla de San Miguel.
TEMPORALES DE LLUVIAS
Por su parte, la precipitación acumulada en 2019 se considera "normal" ya que hasta el 17 de diciembre es 501.4 l/m2, un 1% inferior que la del promedio climático del periodo 1981-2010.Sin embargo, la precipitación ha estado repartida de forma muy desigual. Mientras que en un 16% del territorio, en el litoral norte de Valencia y litoral y prelitoral de Castellón, el año ha sido muy seco, en el 15%, sur de Alicante e interior sur de Valencia, ha sido muy húmedo e incluso extremadamente húmedo, el más húmedo desde que hay registros en observatorios como el del aeropuerto de Alicante-Elche y Orihuela.
Asimismo, como viene siendo habitual en los últimos años, se alternan periodos secos combinados con breves periodos de lluvias torrenciales. Así, durante los días 18 al 22 de abril se produjo el primer gran temporal mediterráneo del año, que en Jávea dejaron en un día 283,8 l/m2, el mayor acumulado desde la riada de 1957. Hasta agosto no volvió a llover, pero en la madrugada del 20 al 21 se acumularon 138 l/m2 en El Verger.
Sin embargo, el fenómeno meteorológico más destacado de 2019 fueron la DANA de los días 11 al 15 de septiembre que concentró en Orihuela en seis horas el 70% de las lluvias del todo el año. Finalmente, entre los días 2 al 5 de diciembre se produjo un nuevo temporal mediterráneo que esta vez sí que fue con lluvias generalizadas en las tres provincias.
Por su parte, el otoño climático 2019 (trimestre septiembre-octubre-noviembre) ha resultado muy cálido y pluviométricamente normal. En concreto, la temperatura media ha sido 16,8 grados que es 0,6 grados más alta que la del promedio normal mientras que la precipitación acumulada ha sido 177.0 l/m2, que es un 7% inferior que la del promedio climático del periodo 1981-2010.