Adaptar la legislación vigente, aprobada hace 30 años, a la nueva realidad social, pero, sobre todo, a los nuevos métodos de juego como las apuestas online. Este es el objetivo principal del Govern del Botànic para intentar frenar el aumento de la ludopatía que se está produciendo, especialmente, entre los menores de edad. Para ello, el Consell ya ha aprobado el proyecto de Ley del Juego de la Comunidad Valenciana para prevenir la gran adicción del siglo XXI.
La transformación de España respecto al juego ha sido abismal. Y es que se ha pasado de unos centenares de salones de juegos o salas de apuestas en el país a más de 6.000. Pero, además, la proliferación de las tragaperras en los establecimientos – que ya alcanza las 230.000 – y la llegada de las apuestas online ha provocado que la ludopatía cada vez esté más presente en edades más tempranas.
Así, como explican desde Fejar (Federación Española de Jugadores de Azar Rehabilitados), si antes el perfil era un varón de 40-45 años que llevaba siete años jugando a las tragaperras, ahora es un joven de 22 a 28 años que lleva dos años apostando online. “Las apuestas deportivas son la puerta de entrada”. Y es que de acuerdo con el estudio realizado por la Universitat de València, el 20% de los varones menores hacen apuestas de este tipo dos veces al mes.
A veces, se cree que el juego online por Internet es el mayor problema, pero los expertos dicen que tienen sistemas de verificación más exhaustivos que en los locales donde, principalmente, se juega online. Apuestas deportivas, póquer, tragaperras online o la ruleta electrónica son algunas de las ofertas que se encuentran en los bares donde, según el estudio, “el 76% de los menores valencianos encuestados eligieron los bares para jugar”. Por eso son claros cuando aseguran que es necesario quitar este tipo de máquinas de los bares, así como endurecer la ley respecto a las salas de apuestas.
Y esto es, precisamente, en lo que ha trabajado el Consell. De esta manera, la ley no solo prohíbe hacer efectivo el pago de premios de las máquinas de apuestas en bares, sino que se refuerza la protección de los menores obligando a los locales de juego a establecer un control de acceso a pie de calle. Anteriormente, tan solo era necesario este control en la zona acotada del salón, pero con la nueva ley se fija en la entrada al local.
A partir de la aprobación de la Ley del Juego de la Comunidad Valenciana, los locales tendrán un plazo de tres meses para adaptarse a la nueva normativa. Asimismo, permitir el acceso tanto a menores, como a personas inscritas en el Registro de Personas Excluidas de Acceso al Juego supondrá multas a partir de los 6.000 euros e, incluso, la suspensión de la autorización y cierre del local durante un periodo de 5 años.
En cuanto al juego online, la Comunidad Valenciana se une a otras autonomías como Madrid, Castilla y León o País Vasco para regular esta práctica, y pedir al Gobierno central que, en el marco de sus competencias, no permita la publicidad de este tipo de apuestas a personajes famosos, que son referentes entre los jóvenes.
Finalmente, la distancia mínima entre las salas de apuestas sigue en el aire. Así, aunque no se contempla dentro del proyecto de ley, es más que probable que se llegue a un acuerdo. De hecho, el Consell ya propuso una distancia mínima de 700 metros entre casas de apuestas.