Fumata blanca. Les Corts Valencianes han aprobado hoy, como estaba previsto, los Presupuestos de la Generalitat Valenciana para el próximo ejercicio. Los votos a favor del bipartito PSPV-Compromís, junto los de Podem, han sacado adelante las cuentas, frente al rechazo de Ciudadanos y Partido Popular y la abstención de los cuatro exdiputados de Ciudadanos, ahora No adscritos.
El pescado ya estaba vendido. Y es que, tras semanas de indefinición, el portavoz de Podem, Antonio Estany, anunció el pasado martes su apoyo a los Presupuestos, y aseguró así que estos salieran adelante en el día de hoy. No obstante también anunció las condiciones de su apoyo: medidas fiscalizadoras para garantizar el cumplimiento de las partidas presupuestarias.
Por eso, hoy mismo, poco antes de la votación, el propio Estany se ha reunido con la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, y el president, Ximo Puig, para plasmar sus firmas en un acuerdo que obliga, por ejemplo, al conseller de Hacienda a comparecer trimestralmente para rendir cuentas; e impide, además, disminuir las partidas dedicadas a programas sociales.
"Alguna noche de domingo" ha costado el pacto, en palabras de Puig. Y es que desde las filas del Botànic insisten en el gran trabajo realizado para conseguir llegar a un acuerdo entre todos sus representantes. Unos Presupuestos que demuestran, según Mónica Oltra, que "el Botànic està a prueba de bombas".
Desde la oposición ven la unión de la izquierda ya resquebrajada. David de Miguel, uno de los cuatro No Adscritos que se ha abstenido, ha incidido en que este Presupuesto puede ser "el último del Botànic".
Y desde Ciudadanos, Woodward ha calificado la aprobación de "un sainete". "Nadie dudaba que el Botànic acabaría cediendo a Podem", ha sentenciado. Y eso que el acuerdo tripartito ha llegado sin ninguna concesión más a la formación morada: ni la tasa turística, ni el sistema SDDR de reciclaje.
Precisamente por ello, en Podem han admitido "no estar del todo satisfechos", en concordancia con el ya parodiado "estamos moderadamente satisfechos" de su síndic, Antonio Estany. Él mismo comentaba con el president la burla que había hecho el PP de su sentencia. Sonrisillas cómplices entre ambos ante las cámaras.
Sin duda, la estrella de la mañana ha sido Isabel Bonig. "Esta es una gran nación, que es España", iniciaba su discurso guerrero. Continuando con sus palabras, la ideología que ha hecho más por la igualdad y la libertad es "el liberalismo económico y el humanismo cristiano". Murmuros irónicos en la cámara.
De nuevo, la síndica del Partido Popular ha aprovechado para atacar la nueva radiotelevisión pública, "TeleOltra", y ha calificado las cuentas aprobadas de "caos absoluto". Y la sentencia definitiva: "el cambio político empieza ya".
Mas allá de previsiones sin fundamento, lo único claro ahora mismo es que los Presupuestos han salido adelante y han culminado un curso parlamentario completo de cambios, sorpresas y decepciones. En enero se retomará la actividad con los ánimos, ya veremos si renovados, tras las fiestas navideñas.