Les Arts: otro pufo con problemas

Després de la imputació en 2015 de Helga Schmidt, intendent dels Arts triada per Eduardo Zaplana; el seu substitut, Davide Livermore, dimiteix ara per traves administratives

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El Palau de Les Arts se ha convertido en los últimos años en un verdadero dolor de cabeza para los gobiernos valencianos. Para el anterior, porque tuvo que hacer frente a un caso de corrupción más en su mandato protagonizado por la entonces intendente de la institución, Helga Schmidt; y para el actual ejecutivo, porque vivió la semana pasada la dimisión del intendente Davide Livermore por trabas administrativas. Así pues, la Conselleria de Cultura deberá encontrar una persona sustituta próximamente.

La historia se remonta 17 años, hasta el 2000, cuando el president de la Generalitat, Eduardo Zaplana, convirtió a Helga Schmidt (fotografía) en la encargada de dirigir el aún llamado Palacio de Las Artes con el objetivo de situarlo en lo más alto de los circuitos operísticos europeos y mundiales, dada su dilatada carrera y experiencia. Cinco años más tarde, el edificio fue inaugurado por la reina Sofía, de quien recibe su nombre actual. Y en 2006, el Palau empezó a tener una programación regular.

El pufo de Schmidt

Los problemas empezaron a partir del año 2013, cuando la Conselleria empezó a detectar "irregularidades" en algunos contratos. Irregularidades que admitió ya haber subsanado. Pero a estas sospechas, se sumaban las continuas críticas de la oposición por los elevados gastos de representación, dietas y viajes de Helga Schmidt y su equipo. En 2015 estas sospechas se convirtieron en investigación policial tras la denuncia de un ex trabajador sobre una presunta trama ilegal gracias a la cual Schmidt habría cobrado comisiones irregulares cifradas en más de 500.000 euros.

Tras el registro del monumental espacio, la intendente fue apartada por el propio gobierno valenciano, y posteriormente encausada en el caso Palau, por el que todavía está acusada de malversación de caudales públicos, prevaricación y falsedad documental. La causa todavía está en marcha, y el día 5 de este mismo mes el juzgado dictó la apertura de juicio oral contra Helga Schmidt, el ex director financiero de la institución y tres empresarios. En el juicio, que se celebrará ya en 2018, se piden para ella más de 7 años de prisión, además de una indemnización conjunta de 370.000 euros por responsabilidad civil.

Davide Livermore dimite

Su sustituto elegido fue Davide Livermore (fotografía), que ha mantenido el cargo desde 2015 hasta este mismo mes, y que ahora deja por cuestiones muy distintas a las de su predecesora. Considera, tras dos años, que su contrato es "incompatible" con el desarrollo de su propia carrera profesional artística. Y además, asegura que se está vulnerando la legislación, porque todos los empleados de la ópera deben pasar por un concurso público.

El problema de la incompatibilidad existe desde el principio, no obstante, según sus declaraciones, ni el anterior ejecutivo ni el actual han conseguido ponerle solución, "a pesar de su interés en mantenerme en el cargo", aclara. Además, el ya ex intendente de Les Arts, apoyado por el afamado tenor Plácido Domingo, apunta que en ninguna ópera se pide tal exclusividad.

Y respecto a la obligatoriedad del concurso público, mantiene que este impide la contratación de "artistas relevantes". "Yo no puedo hacer un concurso público por cada cantante que voy a poner en una ópera", ironiza Livermore. En ese sentido, a su juicio, la ópera de Les Arts es "una cosa no ordinaria", por lo que debería gozar de un reglamento extraordinario. Así que lo que fue un pufo y se creyó haber solucionado, ahora es un nuevo problema para el que la Conselleria de Cultura, encabezada por Vicent Marzà, deberá encontrar solución

Fotografías: @AlbertVilella1 / @Elasombrario 

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