- El 23% de los hábitats naturales costeros de la Comunitat Valenciana está amenazado por la "urbanización masiva"
- Olas de calor como la actual serán cada vez más comunes, extremas y largas
Cada vez más, la sociedad está concienciada de la importancia de proteger el medio ambiente si queremos disfrutar de un futuro más sano y menos contaminado. Para ello, son muchas las medidas que se están impulsando desde las administraciones públicas, con el objetivo, por ejemplo, de fomentar el reciclaje, pero también son muchos los movimientos que están surgiendo para mostrar que todavía hace falta hacer mucho más para frenar los efectos de un cambio climático que es ya una realidad.
Así, un verano más, lateuaterra.com ha lanzado la campaña #desentierralacolilla para concienciar a la población de la importancia de mantener limpias nuestras playas y, de paso, denunciar el estado de las costas con la intención de hacer reflexionar a los fumadores sobre el impacto que supone tirar la colilla en la arena de nuestras playas.
Es la segunda edición de esta campaña de sensibilización y, “después del éxito del año pasado, esperamos repetir porque necesitamos seguir visibilizando esta problemática”, explican desde lateuaterra.com. De esta manera, la campaña consiste en subir fotografías en cualquier red social de colillas enterradas en la arena, utilizando el hashtag #desentierralacolilla, e insertando, además, la ubicación o el nombre de la playa.
Y es que de acuerdo con la ONG Ocean Conservancy, el 13% de los residuos que se recogieron, en la campaña mundial que impulsó en 2017, fueron colillas de cigarros. Sin embargo, en la Comunidad Valenciana la situación también es preocupante. La Fundación Oceanogràfic alertó que tan solo en la playa del Arenal de Xàbia se había recogido un total de 4.000 colillas.
La presencia de estos residuos en nuestras playas tienen un efecto devastador. Con la exposición al sol y el contacto con el mar, las colillas se descomponen liberando elementos contaminantes que no solo afectan a las especies de la superficie, sino que pueden dañar la calidad del agua provocando la muerte de organismos del ecosistema marino e, incluso, modificar la cadena alimentaria porque, aunque sea un residuo diminuto, “tarda en descomponerse entre 5 y 10 años”.
La teuaterra.com es la primera plataforma de crowdfunding especializada en proyectos medioambientales. De nuevo, lanza la campaña #desentierralacolilla para intentar poner freno a la contaminación de nuestras playas.